La presidenta de la Asamblea Legislativa, Lorena Peña, ha gastado en un año más de 50 mil dólares del erario público en dádivas a oenegés afines a la izquierda salvadoreña, gastos de “consumo” que van desde desayunos en restaurantes, artesanías, café, parqueo en centros comerciales, artículos de Navidad, semitas, trajes, guayaberas, hasta en la creación de un sitio web de uso personal.
De acuerdo con una serie de publicaciones realizadas por Diario El Mundo, Peña utilizó dinero del Fondo Circulante de la Asamblea para realizar estos gastos, mismos que ella salió a justificar este martes diciendo que “todos están bajo la norma y conforme al manual de uso del Fondo”.
La información obtenida por el rotativo a través de la Oficina de Acceso a la Información Pública consiste en 371 documentos, entre ellos recibos y facturas de pagos, sobre los gastos que ha realizado Peña con recursos del Estado.
Pan dulce y comida en días de descanso
Del total de $51,385.59 que peña ha reportado como gastos en el primer año de su gestión, la documentación señala que al menos $5,580.50 fueron utilizados en conceptos de “consumo”, y entre las facturas entregadas por la Asamblea, las compras van desde $3.50 en arreglos florales hasta $947 en “atenciones oficiales”, realizadas el día sábado 25 de junio del 2015, día de descanso para la mayoría de instituciones públicas, incluida la Asamblea.
Asimismo, la documentación publicada por El Mundo evidenció gastos realizados por la compra de artesanías, una factura de $146.93 por la compra de cuatro hamacas y ocho forros para cojines. Pero además, $126.04 en facturas de semitas.
Ropa
Entre las facturas y recibos además destacan algunos emitidos en tiendas de ropa. Por ejemplo, hay un recibo que refleja una compra realizada por Peña por un total de $300 en un almacén ubicado en el centro comercial Galerías Estalón. Según el detalle de este recibo, la presidenta de la Asamblea compró en esa ocasión una chaqueta manga larga, blusa sólida Taupe, blusa Croop, chaqueta Ml Jaspea, un centro y una camisa.
Asimismo, hay otro pago por $314.30 por chaqueta petite, blusa Za, pantalón Trouser y pantalón Zac; y otras facturas hasta por $204.88 con las que Peña compró 24 guayaberas de diferentes tallas, todas color beige.
Donaciones “por humanidad”
De ese mismo fondo estatal, Peña sacó “donaciones” que decidió entregar con total libertad a asociaciones que históricamente han sido militantes del FMLN, partido al que ella también pertenece. La Asociación de Lisiados de Guerra de El Salvador (ALGES), por ejemplo, recibió dos donaciones que juntas suman la cantidad de mil dólares. La primera entrega fue el 24 de junio de 2015 y la segunda el 13 de mayo de 2016.
La justificación documental para este gasto fue “cubrir gastos de mantenimiento de el local albergue y alimentación de pacientes del mismo”.
De ese mismo Fondo, Peña destinó otros $1,000 para la Asociación de Mujeres Tecleñas (AMT), fundada por Elda Gladis Tobar Ortiz, secretaria municipal del FMLN en Santa Tecla y esposa del ahora vicepresidente de la República Óscar Ortiz, quien además fue alcalde de ese municipio durante 14 años.
Peña, luego de las publicaciones periodísticas salió al paso de los señalamientos y aseguró que todo se trata de una “cortina de humo” y justificó los gastos uno a uno con palabras, más no mostró documentación.
Sobre las donaciones dadas a organizaciones que históricamente han sido afines al FMLN, Peña dijo que estas fueron cuestiones de “humanidad”.
“A ALGES le mataron a su presidente, su familia (del presidente) corría peligro, había que movilizarla y no tenían como. Esa es gente que a una le falta un pie, a otra una mano, otra es parapléjica… y me pareció de humanidad dar esos fondos”, dijo Peña, y añadió que “hay (un gasto en una) silla de ruedas y un pequeño respirador que se estaba muriendo en un hospital público porque no había ese respirador de $300 que costó. Entonces, yo creo que sí es ético”.
Sobre la compra de las camisas de $50 dijo que eran para su personal de seguridad y respecto a si el precio le parecía acorde a su discurso de austeridad dijo que le fue necesario comprarlas a ese precio porque necesitaba que le dieran una factura “formal”. “Lo que no es ético es adjudicar que yo compré camisas para mí. Si quieren vayan y miren las tallas”, dijo en una conferencia de prensa.
Estas publicaciones surgen después de que Peña señalara públicamente el uso de recursos del estado de forma ilícita por parte del diputado David Reyes, del partido ARENA. En este caso, Reyes prestó una camioneta propiedad de la Asamblea Legislativa a su hermana para que fuera a Nicaragua en periodo vacacional.
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Una serie de publicaciones en Twitter revelaron el caso el pasado jueves 4 de agosto; sin embargo, el diputado lo negó a través de sus redes sociales calificando la noticia de “falsa”. Dos días después, la presidenta de la Asamblea confirmó la información y condenó el uso de recursos públicos para “fines personales”.
Este mismo tema fue sobre el cual Peña quiso orientar la atención al durante su conferencia de prensa ofrecida este martes y calificó los señalamientos en su contra como “cortina de humo”.