El cerro Eramón, ubicado en Chalatenango, El Salvador, se eleva a aproximadamente 937 metros sobre el nivel del mar, ofreciendo una vista panorámica impresionante para los amantes de la naturaleza. Este cerro es famoso por la «alfombra de nubes» que se puede observar desde su cima en las primeras horas de la mañana, cuando las nubes se forman por debajo, creando un paisaje único.
El acceso a la cima se realiza por varias rutas, con tiempos de ascenso que varían entre una y dos horas. Desde la cumbre, los visitantes pueden disfrutar de las vistas de los ríos Lempa y Sumpul, y de los volcanes Izalco y Chinchontepec. El clima es cálido durante el día, pero las temperaturas pueden descender considerablemente por la noche, lo que lo convierte en un lugar ideal para acampar.
La «alfombra de nubes» se forma cuando el aire húmedo cercano al suelo se enfría rápidamente durante la noche, provocando que el vapor de agua se condense en nubes bajas. Por su ubicación y la altura del cerro, las nubes que se ven desde arriba crean la ilusión de un mar blanco que cubre el paisaje, un fenómeno que es particularmente visible en las primeras horas de la mañana.
Además de su belleza natural, el cerro Eramón tiene un significado histórico, habiendo sido habitado por la comunidad indígena Aguacao y utilizado como refugio durante la guerra civil salvadoreña. Hoy en día, es un destino popular para actividades como senderismo y campamento.