Europa sufre una ola de calor proveniente del desierto del Sahara que inició desde esta semana. La llegada de la masa de aire caliente desde África afecta a casi toda Europa occidental.
En París las autoridades toman las medidas de prevención por lo cual han instalado fuentes supletorias y mantendrán los parques abiertos durante la noche.
Mientras tanto, en Alemania se prevé valores de hasta 40 grados. Las autoridades han introducido límites de velocidad en dos autopistas en el este del país, esto ante el peligro de dilatación del asfalto y el aumento del riesgo de accidentes.
El calor excesivo genera el temor en la población que se repita las situaciones vividas en Francia en el 2003, cuando fallecieron alrededor de 15.000 personas en 15 días.
La ola de calor dejará en Europa temperaturas superiores a los 40 grados centígrados en algunas zonas debido a la entrada del aire caliente del Sahara.
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