El papa Francisco llegó este lunes a Holguín, uno de los centros más antiguos del cristianismo en Cuba y provincia natal de los hermanos Castro: una inmersión en la zona rural de la isla en la víspera de su partida a Estados Unidos.
Los holguineros gritaron Bienvenido, agitaron banderas nacionales y del Vaticano, y alguno incluso lloró cuando el papa Francisco recorrió hoy en el papamóvil, varias avenidas de esta ciudad del oriente de Cuba.
«Sé con qué esfuerzo y sacrificio la Iglesia en Cuba trabaja para llevar a todos, aun en los sitios más apartados, la presencia de Cristo», dijo el papa argentino ante la muchedumbre congregada en la Plaza de la Revolución Calixto García de Holguín -760 km al este de La Habana-, que desafió el sofocante calor del oriente cubano para escucharlo. (AFP)