El Sevilla logró el pase a la siguiente ronda de la Copa del Rey tras imponerse de manera sobria pero solvente al Las Rozas (0-3) en un duelo con poca historia en el que Kelechi Iheanacho se estrenó como goleador y Gerard Fernández ‘Peque’ se fue lesionado.
La andadura copera del conjunto andaluz arrancó a veinte kilómetros de la capital de España, en un estadio con césped artificial pero bien equipado pese a encontrarse el rival en Tercera Federación. Aún así, pese a la diferencia de categoría, no lo pasó bien.
El ambiente festivo propio de una cita de relevancia para los locales, que incluso estrenaban patrocinador -Las Rozas Village-; fue un estímulo para que el bando roceño saliese sin complejos, generando algo de incertidumbre en balones largos a espaldas de la defensa que obligaban a salir de debajo de los palos a Álvaro Fernández.
Esos acercamientos esporádicos, y la falta de fluidez de los de Xavi García Pimienta, dibujaron una primera mitad gris de la que pese a todo salió victorioso el Sevilla aprovechando el único punto débil que ofreció el anfitrión, las salidas a la contra del rival tras el balón parado.
Después de varios avisos en este sentido, al final terminó encontrando premio el elenco hispalense a los cuarenta minutos cuando la zaga despejó una falta lateral y Juanlu capturó el esférico para entregárselo en banda derecha a Stanis Idumbo. Progresó el extremo y acabó poniendo un centro al área que Luis Enrique Méndez desvió hacia su propia portería para hacer el 0-1. Pudo el equipo de azul igualar acto seguido, pero un disparo potente y seco de Joselu se marchó muy cerca del palo.
En la segunda mitad salieron más enteros y dominadores los visitantes, buscando el segundo tanto. Y lo encontraron pronto, al cuarto de hora, al rematar Kelechi Iheanacho en el interior del área, al alimón con un defensa, un centro de Juanlu, quien había quemado a los zagueros con una gran cabalgada.
No se vino abajo pese al golpe el de casa ya que acto seguido dispuso de dos oportunidades clarísimas para recortar distancias. Álvaro Escolano primero con un tiro desde la frontal e Iván Quivira después mediante un cabezazo a la salida de un córner pusieron a prueba a Álvaro Fernández, pero se encontraron con dos excelentes intervenciones del arquero.
Sin capacidad para meter más presión, fruto del cansancio acumulado, el plantel de Manu González se fue desinflando. Y lo aprovechó el Sevilla para hacer el 0-3 definitivo al rematar Iheanacho a las mallas un esférico que había quedado muerto tras rebotar en un defensa después de un disparo de Peque.
Con todo ya decidido, este último acabó poniendo la nota negativa tras sufrir un problema muscular superado el minuto 80 que le obligó a ser sustituido por Pedrosa. Fueron los últimos compases de un nuevo triunfo para los sevillistas, que solo han perdido uno de sus seis últimos partidos oficiales.