Dani Carvajal saboreó ante Serbia, en el primer paso de España en la cuarta edición de la Liga de Naciones, un momento soñado, ser capitán de la selección española, justo el día en el que se cumplían diez años de su debut y el partido 50 como internacional, con un brazalete que aseguró representa «una trayectoria larga, mucho esfuerzo y sacrificio».
«Es un orgullo tremendo. Sobre todo por poder salir de inicio con el brazalete de capitán, significa mucho para mí. Ser la figura del capitán en el terreno de juego hace referencia a una trayectoria larga, a mucho esfuerzo y sacrificio. Fue un día muy especial», recordó Carvajal a los medios de la Federación con emoción.
Un 4 de septiembre de 2014 se produjo el estreno de Carvajal con la absoluta en una derrota de España en un encuentro amistoso en París, 1-0 ante la Francia de Karim Benzema, Paul Pogba o Antoine Griezmann. «Lamentablemente perdimos 1-0 pero es un recuerdo muy bonito. Fue un debut soñado ante una gran selección y fue el inicio de esta carrera con España», rememoró.
Desde entonces, una larga carrera de éxitos en la carrera de Carvajal con el Real Madrid y partícipe de las recientes conquistas de la selección, la Liga de Naciones 2023 y la Eurocopa 2024 en un año en el que ha sido nominado al Balón de Oro.
«Vas madurando como persona. Apenas tenía 21 o 22 años. Al final, cambias, mejoras, intentas ahora ser el ejemplo y el espejo de los jóvenes donde mirarse. Dentro del campo vas mejorando también con tu experiencia, pero con las mismas ganas e ilusión que siempre», afirmó.
«El tiempo pasa rápido, pero puedo estar orgulloso de que en estos diez años todos los seleccionadores han contado conmigo. Le doy mucho valor y agradezco a la Federación el apoyo que me ha dado desde el primer día. Nunca he llegado a tener un puesto asegurado, siempre he tenido grandes compañeros y grandes rivales en mi posición. Me ha costado conseguir esa titularidad y ahora parece que estoy teniendo más continuidad en mi club y hace que con España también la pueda tener», sentenció un jugador que a sus 32 años promete tener cuerda para rato.