miércoles 30 de octubre del 2024

Francia elimina a Argentina y pasa a semifinales en un agónico duelo

por Redacción


La enorme tensión se reflejó en una trifulca entre jugadores y miembros de los equipos técnicos de ambas selecciones tras el pitido final.

Francia eliminó a Argentina por un apretado 1-0 para pasar a semifinales del torneo de fútbol de los Juegos Olímpicos de París, en un agónico duelo disputado este viernes en Burdeos en el que el esfuerzo albiceleste no logró transformar sus ocasiones en gol.

El temprano gol de Mateta en el minuto 5 terminó siendo decisivo, sin que la insistencia argentina, con un buen puñado de ocasiones en ambos tiempos, lograra igualar el duelo.

Francia salió intensa, con presión alta, y logró su premio muy pronto, cuando Mateta remató cruzado en el primer palo un saque de esquina, sin que Gero Rulli pudiera hacer valer su estirada.

El tanto forzó a los argentinos a avanzar sus líneas, pero sin generar mucho peligro a causa de la seguridad de la defensa francesa y a los numerosos balones que cortaron Millot y Koné en el centro del campo.

Francia apostó por vertiginosos contraataques gracias a la velocidad de su tripleta atacante, que puso en serios apuros a la defensa albiceleste en varias ocasiones.

En el minuto 18, Otamendi salvó apuradamente un espectacular remate de tacón y de espaldas de Millot que iba a la red, y solo dos minutos después Rulli salvó un remate franco de Mateta.

La primera ocasión clara para Argentina fue un remate de Ezequiel Fernández desde fuera del área que Restes envió a córner con una buena estirada. El saque de esquina fue rematado de cabeza por Otamendi a las manos del meta francés.

La jugada abrió un cuarto de hora final del primer tiempo con un claro dominio argentino en busca del empate, con Julián Álvarez liderando el ataque.

Y ahí llegó un remate de cabeza de Gio Simeone que, apenas a cinco metros de la línea de gol, salió muy alto para desesperación del jugador y de sus compañeros.

El primer tiempo se consumió con ese dominio argentino al que Francia opuso rápidas contras. La posesión del balón fue para los albicelestas, con un 60 %.

La segunda parte comenzó como había terminado la primera. La presión argentina fue insistente mientras Francia lo fiaba todo a sus rápidas contras.

Mascherano, que había sustituido en el descanso al amonestado central Di Cesare, metió refresco en el centro del campo con la entrada de Beltrán, y Julián Álvarez envió alta la primera ocasión que tuvo en este período.

Mateta estuvo a punto de repetir su gol, con otro remate de cabeza en el primer palo a la salida de un córner que se estrelló en el exterior de la red.

Ya en el minuto 76 y apremiado por el tiempo, Mascherano retiró a su lateral izquierdo (Soler) para incorporar a otro atacante, Luciano Gondou.

Pero la defensa francesa se mantuvo firme, encabezada por sus dos experimentados centrales, el sevilista Loïc Badé y Castello Lukeba (Leipzig).

El árbitro, el uzbeco Tatanshev, anuló tras aviso del VAR un segundo gol francés de Olisi (m.84) por una falta previa de Akliouche que pareció inexistente en la repetición, lo que encendió aún más al público francés.

Entre cambios, lesiones y la larga consulta con el VAR hicieron que el descuento llegara a diez minutos agónicos para ambas partes.

Restes rechazó un remate de Beltrán y después tres disparos argentinos se fueron altos, cuando sus autores estaban en buena posición para marcar.

Tras la última ocasión de Gondou, Mascherano se desesperaba, de rodillas y con las manos en la cara.

Argentina, que tenía sobre el campo cuatro campeones del mundo en Catar (Otamendi, Álvarez, Almada y Rulli, aunque solo los dos primeros jugaron con regularidad entonces), no logró que su superior técnica y ese plus de competividad que siempre aportan sus selecciones marcaran la diferencia.

La enorme tensión se reflejó en una tángana entre jugadores y miembros de los equipos técnicos de ambas selecciones tras el pitido final, aunque aparentemente sin acciones graves.