El Salvador
viernes 27 de diciembre de 2024

Arteta vuelve a quedarse en la orilla

por Redacción


El Arsenal lo ha intentado todo, pero ha caído ante un City que no regala un ápice y que asfixia a sus rivales.

De forma incluso más dura que la temporada pasada, el Arsenal de Mikel Arteta ha vuelto a quedarse en la orilla de ganar la Premier League. Tras veinte años de sequía, los ‘Gunners’ han estado más cerca que nunca, pero han sido superados de nuevo por el mejor equipo de Inglaterra, seguramente de su historia, un Manchester City implacable que ha ganado nueve encuentros seguidos para certificar su cuarta Premier League consecutiva.

La tiranía del Manchester City, que se ha llevado seis de los últimos siete títulos, ha arrasado con las esperanzas del mejor Arsenal de los últimos veinte años. De hecho, los 89 puntos que ha logrado son la mejor cifra desde que se coronó campeón en la temporada de los ‘Invencibles’, en la 2003-2004, y le hubieran valido para ganar la liga en 16 campañas desde la implantación de la Premier League en 1992.

El Arsenal lo ha intentado todo, pero ha caído ante un City que no regala un ápice y que asfixia a sus rivales a ganarlo todo para siquiera tener una opción contra ellos. Ni un Arsenal prácticamente perfecto ha podido ganar, caso similar al del Liverpool, que en los nueve años de Jürgen Klopp solo ha ganado un título liguero y que ha perdido dos ligas por un solo punto de diferencia.

La presión de los de Pep Guardiola es tal que, cuando a falta de seis jornadas, el City tenía una ventaja de apenas dos puntos respecto al Arsenal, es decir, con 18 aún en juego, la sensación general en Inglaterra es que la Premier estaba más que sentenciada y que el City ni aflojaría ni se dejaría puntos por el camino.

Desde aquel empate a cero el 31 de marzo contra el Arsenal en el Etihad Stadium, no solo es que el City no haya pinchado, es que sus números son de otro mundo. Han ganado todos los encuentros por dos goles o más de diferencia, cuatro de ellos por cuatro tantos de ventaja, marcando cuatro goles o más en seis de los nueve partidos finales.

Es una barbaridad que solo anima a la resignación y a pensar que el año que viene se volverá a intentar. Y esa es la tarea más difícil para el Arsenal, que tendrá que afrontar la temporada que viene consciente de que cualquier fallo cuesta el título.

Después de que en la 2022-2023, el Arsenal se convirtiera en el equipo en la historia con más días en el liderato (248) sin ganar el título, este curso la Premier se les marchó en el mes de diciembre.

En el periodo más ajetreado del fútbol inglés, el Arsenal vivió sus días más negros ente el 9 y el 31 de diciembre, con tres derrotas y un empate. Cayeron ante el Aston Villa (1-0), West Ham United (0-2) y Fulham (2-1) y empataron contra el Liverpool (1-1). En estas fechas solo ganaron al Brighton & Hove Albion (2-0).

Pese a que es injusto e imposible señalar un momento como el culpable de la derrota final, lo cierto es que el City, en ese mismo periodo, ganó tres partidos y empató uno, y comenzó una racha el 10 de diciembre que dura hasta la fecha. Su última derrota data del 6 de diciembre, contra el Aston Villa (1-0); son 23 partidos seguidos sin perder en la competición doméstica.

Ante este ritmo, cualquier equipo sucumbiría. Que el Arsenal haya llegado con posibilidades hasta la última jornada, por mucho que haya acabado en segunda posición, es más motivo de elogio que de crítica, sobre todo para una plantilla que cuenta con una media de edad de las más bajas de la Premier, con 25 años, y que prácticamente ha jugado toda la temporada sin ‘nueve’, por las lesiones de Gabriel Jesús y por el mal rendimiento del brasileño de cara a gol -apenas cuatro goles en 26 partidos en Premier-.

Entre las lesiones de larga duración, de Takehiro Tomiyasu, Emile Smith Rowe, Fabio Vieira y Thomas Partey, el debate creado por la prensa en torno a la portería, con David Raya y Aaron Ramsdale, y una plantilla a todas luces con menos profundidad que la del City, Arteta, por segunda temporada consecutiva, ha peleado un título que, en verano, parecía prácticamente imposible.

Sobre todo si se hubiese adivinado que con 89 puntos no hubiese sido suficiente para levantar el título.

Con cuatro Premier League consecutivas, Guardiola crea una dinastía sin precedentes en la historia del fútbol inglés; nadie había ganado cuatro ligas seguidas. Solo el Huddersfield Town (de 1923 a 1926), Arsenal (1932-1935), Liverpool (1981-1984) y el Manchester United, en dos ocasiones, de 1998 a 2001, y de 2006 a 2009, habían cosechado tres trofeos seguidos.

El City abre una nueva era y solo queda preguntarse si a Guardiola aún le queda hambre y ambición para más o si, con su contrato venciendo en junio de 2025, decidirá buscar un nuevo reto tras ocho años ya en el norte de Inglaterra.