El pasado sábado 1 de abril, el actual campeón del fútbol salvadoreño, Club Deportivo FAS enfrentó la jornada 14 del Clausura 2023 ante Jocoro en el estadio Óscar Alberto Quiteño, el cual terminó con un resultado poco favorable para los tigrillos.
El encuentro finalizó con un marcador de 1-3 a favor de los fogoneros, en los que anotaron Mario Machado, Juan Carlos Argueta y Luis Acuña. Por el lado de FAS, el único tanto fue de Camilo Salazar.
El hecho lamentable ocurrió en las afueras de los camerinos, donde muchos aficionados de FAS esperaron a los jugadores, como ya había ocurrido en un partido anterior. Uno de los jugadores que habló con la afición fue el guardameta Kevin Carabantes, esto luego de recibir una llamada de su esposa, la cual le preocupó.
«¿Por qué nos dan la espalda hoy?», expresó a los aficionados que le rodeaban. Luego agregó «Mi esposa me acaba de llamar preocupada que le van a quebrar los vidrios a mi carro. ¿Y si le pasa algo a mi hija y a mi familia?»
«Eso no te lo van a hacer, viejo», fue la respuesta de un aficionado. Otro le dijo: «Hay tres, cuatro capitanes, hablen viejo».
Carabantes al final se fue caminando entre la multitud de aficionados presentes, quienes seguían gritándole.
El técnico de FAS, Octavio Zambrano, fue pitado al terminar el encuentro y tuvo que ser custodiado por agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) para salir del estadio.
Más allá de la situación que vive el equipo. Hay 2 cosas que debo mencionar, la valentía de Kevin Carabantes de siempre dar la cara, y la otra que ninguna persona merece vivir esta situación. Antes de ser jugadores, son seres humanos, esposos, padres. ¡Así no! @TigoSports_SV https://t.co/pt3MEi2Aaq pic.twitter.com/sgs0Phho4J
— Jerry Quijada (@JerryQuijadaTv) April 2, 2023