Un negocio en las calles de San Salvador nació por uno de los jugadores más emblemáticos y para muchos, el mejor que ha tenido El Salvador. Jorge Alberto González Barillas, mejor conocido como «Mágico» González está a las puertas de cumplir 65 años y acá dejamos una pequeña historia de un emprendimiento que se inspiró en la figura del exfutbolista.
El dueño, Álvaro Guerrero de 44 años, inició con su puesto de hot dog como un proyecto personal luego de renunciar a su trabajo, el cual abrió al público en junio de 2021.
“Esto salió después de la pandemia, pero teníamos claro que no queríamos ser de los hot dogs tradicionales, sino que queríamos un concepto innovador, que se distinguiera que era salvadoreño”, cuenta Álvaro.
De la misma forma, comenta que el nombre tenía que ser relacionado con el fútbol porque él es amante del deporte rey, al igual que toda su familia. “Queríamos vincular la comida rápida con el fútbol y en esa lluvia de ideas, sale la de homenajear al mejor futbolista que nuestro país ha tenido, que es Jorge “el Mágico” González”.
Así fue como decidieron ponerle “Hot Dog El Once”, porque fue el número que utilizó en la selección de El Salvador que participó en el Mundial de España 1982 y también fue el número que utilizó en el Cádiz de España, que fue cuando nos dio a conocer como país a nivel mundial.
Inicios
Lo primero que Álvaro hizo fue poner el carretón de hot dogs en la acera de la colonia Miramonte para la venta y hacerle promoción, poco a poco fue creciendo y creciendo, hasta que se llegó a un punto en el que la demanda era tan grande que la fila llegaba hasta la tercera casa y habían cerca de 40 personas en ella.
“Al ver eso, las demás personas se intrigan, entonces la gente venía y se acercaba”, comenta.
Cuando eran más y más personas las que llegaban, comenzó a notar algunas falencias, una de ellas era el poseer solo un carrito para la venta, lo que generaba que los clientes esperaran hasta dos horas y media por su pedido.
“A las 12:30 yo tenía que salir a hacer la cuenta. Era debilidad porque el carrito tiene una capacidad de hot dogs que se pueden vender y yo salía a cortar la fila, entonces era justo en la hora de almuerzo”, enfatizó.
Fue en ese momento que tomó la decisión de dar el siguiente paso y abrir un local, el cual se instaló en el mismo sector de la colonia Miramonte. “Abrimos acá el local y lo adecuamos a nuestro concepto, a nuestra marca y a nuestro homenaje, pero decidimos mantener el carrito afuera porque es nuestro inicio, lo que nos recuerda el esfuerzo que se hizo”, aclaró.
Ambientación
El local es un homenaje total a Jorge «Mágico» González, donde se pueden ver fotografías del exjugador en las paredes, así como también una frase.
En uno de los espacios del lugar, hay una pequeña cabina que simula un pequeño teatro, donde se observa un sombrero y una varita mágica, elementos de un mago.
Álvaro contó que el pasado mes de diciembre el Mágico los contactó para el cumpleaños de su hijo, Jorge Jesús González Lemus, conocido como “Chus” González, que está en las juveniles del Cádiz. «El hijo vino de vacaciones y yo al inicio no lo podía creer, pensé que era una broma», comentó entre risas.
El carrito de «Hot Dog El Once» llegó a la Fundación Educando a un Salvadoreño (FESA) y ahí celebraron el cumpleaños, en el que también jugaron un partido que fue entre los amigos del Mágico y la reserva de Alianza, donde se formó «Chus».
«El Mágico me dijo que se sentía muy orgulloso de que lo hayamos homenajeado, que toda la familia estaba muy contenta y que nos deseaba lo mejor».
Clave del hot dog
Cuando comenzaron a trabajar en la fórmula del hot dog, pensaron que debía tener las características del Mágico: ser el mejor, muy bueno y tenía que “gambetear” a todos los rivales, en este caso, dentro del mercado de comida rápida.
“Hicimos muchas pruebas, entre ellas fue agregar tocino, pero no encima ni picado, sino que enrollado en la salchicha. Igual elegimos una salchicha ahumada que no la venden en los supermercados y decidimos meterle un hilo de quesillo súper especial para que se logre sentir el sabor”, contó.
Luego vino el tema de los aderezos y no optaron por los tradicionales, elaboraron su propia mayonesa chipotle que le da el toque “mágico”. Además, decidieron ponerle también chimichurri y cebolla, pero optaron por la cebolla morada para darle mejor apariencia. El hot dog lleva el nombre de «culebrita macheteada», en referencia a la conocida jugada de González.
Evolución
Álvaro comentó que iniciar fue difícil, como todo emprendimiento, pero cuando comenzaron a llamar la atención, él mencionó que las mismas personas se convierten en publicidad y los promocionan también.
“No fue fácil, el primer día vendimos 12 hot dogs, el segundo día fueron 14, 15. La primera semana fue bastante baja, pero poco a poco fuimos. La cuestión es persistir, porque muchos se sienten derrotados en los primeros intentos y los negocios son un proceso», dijo,
Desde que abrieron al público y lograron tener el local en la colonia Miramonte, han crecido de tal manera que a mediados de febrero abrieron su segundo local en el Paseo El Carmen. En palabras de Álvaro, «todo ha sido un proceso y sigue siendo un proceso fuerte y trabajoso».
Enfatizó el esfuerzo que requiere innovar y mantener el negocio, en el cual ellos se encargan de hacer todo y trabajan hasta la hora que el cliente los contrata. Su esposa recientemente renunció para apoyarlo y continuar con más clientes que disfruten del peculiar hot dog en honor al Mágico González.