Xavi Hernández, nuevo entrenador del Barcelona, es consciente de que no llega «en el mejor momento de la historia del club» y de que los jugadores «no están pasando por su mejor nivel individual», pero prometió trabajar «lo máximo posible» desde el primer día para recuperar la «excelencia» ya que a su juicio forma parte del ADN de la entidad.
«Necesito ver a la plantilla en el día a día, de momento solo puedo opinar sobre los partidos que he visto, la he visto por momentos muy bien en otros no tanto, y supongo que al final los jugadores tampoco están pasando por su mejor nivel individual, sé que no es una situación fácil para ellos y que no llego en el mejor momento de la historia del club, pero para eso estamos aquí, para trabajar lo máximo posible», dijo el nuevo técnico a los medios del club horas después de confirmarse su contratación.
Comenzó su intervención destacando que vuelve a casa «con mucha ilusión y muchas ganas de ver a los jugadores, de hablar con ellos y empezar a trabajar fuerte con la máxima ambición y pasión posible», sabiendo que asume una «gran responsabilidad» al regresar a Barcelona como entrenador del primer equipo.
«El sentimiento que tengo por este club es muy grande y es un sueño hecho realidad -añadió-. Estoy muy contento de volver al Barcelona, de empezar a trabajar y al final ese es el resumen que haría. Creo que el club ha hecho un gran esfuerzo, y el Al Sadd, y yo también lo he hecho, hemos ido todos en la misma dirección para poder cerrar el acuerdo y estoy con muchas ganas de empezar».
Avanzó que entrará «con mucha exigencia» y con el objetivo de «competir bien y conseguir los éxitos y los resultados positivos» que persigue el club. Y esbozó cómo es su estilo como técnico: «Me gusta tener la posesión del balón, ir al ataque, no especular, ser protagonista con la pelota, ese es el ADN que he vivido y haremos todo lo posible por mantener la posesión, atacar y generar ocasiones de gol».
«Estamos en el Barça, lo que he vivido toda la vida aquí es le excelencia, trataremos de estar lo mas cerca posible de ella, de ganar, de competir y de luchar por todo, no se puede regalar nada, a mi siempre me han enseñado eso y ese es el ADN del club», continuó Xavi.
También apuntó que ha madurado como entrenador y tiene claro que en el banquillo azulgrana tendrá que tomar decisiones «que a veces no gustan al jugador», si bien se mostró tranquilo porque le gusta ser «muy claro y honesto» con los jugadores y ser natural con ellos, entenderlos y tener empatía con todos.
«Tengo muchas ganas de empezar, con mucha ilusión y como culé que soy trataré de transmitirles toda esa pasión», refirió Xavi Hernández, para quien debutar en el banquillo frente al Espanyol en casa supone «todo un reto», para el que reclamó el poyo de la afición. «Necesitamos que los jugadores estén al cien por cien y ofrezcan el mejor rendimiento de inmediato porque no tenemos tiempo», concluyó el nuevo técnico azulgrana.