El producto de años de trabajo en los circuitos de dobles en torneos ATP alrededor del mundo han dado réditos para el tenista salvadoreño Marcelo Arévalo, al escribir historia de forma sobresaliente el pasado miércoles, luego que se convirtió en el primer representante nacional en llegar a una final de uno de los cuatro “Grand Slams”, los torneos más importantes que tiene el deporte blanco en su año calendario.
Arévalo logró la gesta con su compañera en la modalidad de dobles mixtos, la mexicana Giuliana Olmos, con la quien derrotó el miércoles en las semifinales del US Open, a la pareja compuesta por la ucraniana Dayana Yastremska y el australiano Max Purcell, con parciales de 4-6 y 6-4, logrando un 10-6 en la etapa de desempate.
En la final, esperan a los ganadores del cotejo entre la pareja estadounidense compuesta por Jessica Pegula y Austin Krajicek, y el binomio de Desirae Krawczyk y Joe Salisbury, los número dos en la presiembra del torneo de dobles mixtos del US Open.
Olmos y Arévalo, quienes intercambiaron mensajes de forma improvisada en Instagram para acordar su participación en el torneo de dobles mixtos del Grand Slam celebrado cada final del verano estival en la localidad neoyorquina de Flushing Meadows, se han convertido además en la primer pareja de latinoamericanos que llega a la final de la categoría en dicha competencia.
Para los ganadores de la final aguarda una bolsa de $160 mil, mientras que la pareja perdedora se hará con un premio de $78 mil.