El Barcelona inaugurará su participación en la Liga de Campeones como si estuviese realizando terapia con un psicólogo cognitivo conductual, ya que el rival que visitará el Camp Nou este martes será el Bayern de Múnich, que hace poco más de un año le endosó un humillante 2-8 en los cuartos de final de la competición.
Según los expertos en la mente, la evitación experiencial es un factor fundamental en el desarrollo y mantenimiento de un trastorno por estrés postraumático. Así, la mejor terapia en estos casos, sobre todo para superar la ansiedad que comporta, se considera que es la exposición, que a grandes rasgos consiste en enfrentarse al estímulo temido.
El conjunto de Ronald Koeman vivirá esta experiencia justamente 13 meses después de que se originara el trauma, tiempo suficiente como para haber acumulado otros tan traumatizantes o más, como la marcha de Leo Messi, una grave situación económica y una moción de censura.
Del once titular que vivió la pesadilla de Lisboa tan solo cuatro futbolistas ya no forman parte de la nave azulgrana: el mismo Messi, Luis Suárez, Arturo Vidal y Nelson Semedo. Por otro lado, el autor de dos de los ocho goles del Bayern, Philippe Coutinho, podría volver a pisar un terreno de juego como azulgrana en partido oficial por primera vez desde diciembre tras su grave lesión en la rodilla izquierda.
A quien también recuperará Ronald Koeman para la causa será a Gerard Piqué en el eje de la defensa. En cambio, con la marcha de Emerson Royal al Tottenham Hotspur y la duda de Sergiño Dest (tiene un esguince en el tobillo derecho y no se entrenó el lunes) el técnico seguramente tendrá que improvisar en el lateral derecho.
Óscar Mingueza y Sergi Roberto, recuperado de una fisura costal, son las opciones. Pero Koeman también podría regresar a un sistema de juego que ya puso en práctica el curso pasado, el 3-5-2. En ese caso, el de Reus contaría con más opciones para ser carrilero que el de Santa Perpètua de Mogoda. La convocatoria se dará el martes por la mañana.
La delantera será la otra línea que vivirá cambios importantes. Respecto al último encuentro disputado por el Barça, el triunfo por 2-1 ante el Getafe, el equipo catalán ha perdido a Antoine Griezmann y ha incorporado al neerlandés Luuk de Jong.
Con Ansu Fati, Ousmane Dembélé, Sergio ‘Kun’ Agüero y Martin Braithwaite (su lesión en la rodilla izquierda le podría dejar fuera de los terrenos de juego entre tres y cuatro meses) recuperándose de sus respectivas lesiones, el ex del Sevilla apunta a titular en un sistema que tan solo tendría dos delanteros.
Por su parte, el Bayern llega al duelo contra el Barcelona tras liquidar con goleadas sus últimos dos partidos, un 5-0 ante el Hertha y un 1-4 ante el RB Leipzig, aunque todavía no ha alcanzado su mejor versión, según ha reconocido el entrenador Julian Nagelsmann.
Nagelsmann dijo que contra el Leipzig su equipo solo estuvo verdaderamente bien en los primeros minutos de la segunda parte, cuando marcó el segundo y el tercer gol, mientras que en otras fases del partido perdió muchos balones innecesariamente y no aprovechó los espacios que el rival le ofreció.
En ese partido fueron sustituidos Robert Lewandowski, con problemas de abductores, y Serge Gnabry, con un problema en la espalda. No obstante, Lewandowski ha entrenado este lunes con el grupo y, salvo sorpresa, estará en la alineación titular.
Gnabry, en cambio, corrió en solitario y sigue siendo duda. Su sustituto más probable, en caso de que causara baja, sería Jamal Musiala, que hizo un gran segundo tiempo contra el Leipzig.
Nagelsmann ha recuperado a dos hombres claves en defensa como Benjamin Pavard y Lucas Hernández, que empezaron la temporada lesionados y reaparecieron, como titulares, ante el Leipzig.
El destino ha querido que Barça y Bayern vuelvan a encontrarse cuando el primero ni mucho menos está recuperado de la crisis deportiva, económica e institucional que se desbordó el 14 de agosto de 2020.
Pero el conjunto azulgrana se presentará a la cita dispuesto a afrontar el trauma y con una nueva camiseta alegre y rompedora que tan solo lucirá en la Champions. El primer objetivo es poder llevarla en más de seis partidos.