“Va por ti viejita linda”, dedicó el contención apopense, Isaac “Clavito” Portillo, a su abuelita Antonia Justiniano, cariñosamente conocida como “Toña”, por quien el jugador de Alianza se dejó el alma y el corazón en la cancha para ganar la final ante Águila y regalarle el título a alguien que era como su mamá, pero que ya no puede ver más a causa del virus.
“Este título va a dedicado para toda mi familia, para mis padres que desde el primer partido estuvieron acá aunque casi pocos minutos, pero sobre todo va para mi abuelita, que con toda esta situación del virus perdió la vida, va dedicada para ella en donde se encuentre, le estoy totalmente agradecido, así como para toda la afición, que si en algún momento perdieron a un familiar, éste es un pequeñito grano de felicidad hacia ellos y que Dios les bendiga y les dé la fuerza para seguir adelante”, manifestó el jugador que se mandó un partidazo, incluyendo el tercer gol en el 3-0 sobre los emplumados, que les dio el título 15.
Doña Toña perdió la batalla contra el coronavirus a mediados del año pasado, cuando toda la familia de Isaac Portillo se contagió el virus, sin escapar el propio jugador.
Todos lograron superar la enfermedad, pero su abuela, al ser una persona de tercera edad, no lo resistió y falleció, ocasionando un duro golpe a la familia.
Ella fue quien lo “crió y cuidó desde pequeño”, según cuenta el jugador aliancista, para que sus padres pudieran cumplir con sus compromisos de trabajo y estudio. El por ello que la 15 va más alto, con la mirada apuntando al cielo.