El Salvador
miércoles 27 de noviembre de 2024
Deporte

¿Por qué Jonathan Jiménez decidió no festejar con el resto del grupo?

por Astrid Mejía


El autor del primer gol de Alianza en la final, un golazo que encaminó el título, se hizo una promesa que reveló entre lágrimas y respetó al pie de la letra.

Alianza FC festejó anoche la corona 15 con una cena en un restaurante de la Zona Rosa, en la que convivieron jugadores, cuerpo técnico, directivos, familiares y personal administrativo del club; sin embargo, el lateral izquierdo Jonathan Jiménez optó por no asistir para darle cumplimiento a una promesa que se hizo, de salir campeones.

“Lo vamos a celebrar en familia, somos una familia bien unida, mandamos a comprar comida para celebrarlo con ellos. Yo me hice la promesa que si quedábamos campeones yo me iba a celebrar con ellos, no iba a estar con los del equipo, porque ellos son los que me apoyan a mí; contento porque ellos están conmigo en las buenas y en las malas”, reveló el jugador entre lágrimas a Canal 4, luego que árbitro diera el pitazo final.

El lateral tomó la decisión de pasar con sus seres queridos, debido a que ellos siempre han estado ahí apoyándolo, como cuando perdió el título en la final del Clausura 2019 contra el mismo Águila, solo un par de días después de haber perdido también a su hijo con su esposa Nohemy Rodríguez.

“Vivimos una situación bien difícil antes de esa final con Águila, yo perdía la segunda oportunidad de ser padre y fue una situación muy dura porque ya segunda vez que nos pasaba, mi esposa sufrió bastante y psicológicamente creo que nos costó salir, pero Dios sabe cómo nos lleva y nos bendijo a los seis meses con levantar la copa 14 (contra FAS) y hoy nos da la oportunidad de levantar la 15 (ante el mismo Águila). Creo que hay ser pacientes, hay que saber esperar y sé que la bendición de ser padres con mi esposa pronto se nos va a dar”, confía.

Jonathan también dijo que fue un sueño cumplido haber podido anotar un gol en una final, un golazo de zurda que encaminó el título, al haberse tenido fe en un punto clave del partido (41’)

“Siempre tuve el sueño de poder meter un gol en una final, gracias a Dios se me dio esta oportunidad… Me dio el pase Narciso (Orellana) y me quedó el espacio. Pensé en dársela a Cabrita (Portillo) pero vi el espacio en medio y decidí pegarle. No hallé ni cómo celebrar, solo gritar de la euforia que tenía y contento porque empezábamos el camino a la copa”, indicó.