Una semana estuvieron recluidos los seleccionados nacionales Tony Rugamas, Henry Hernández y Edgardo Mira en el centro de contención de Apaneca, Ahuachapán, al dar negativo a las respectivas pruebas de COVID-19, cuyos resultados que les fueron confirmados ayer por el personal médico.
Los tres jugadores decidieron retornar al país luego que las autoridades dieran por concluido el torneo Clausura 2020 de la Liga Nacional de Guatemala el pasado 19 de mayo, pero únicamente Tony Rugamas, quien militó en el Xelajú, sufrió un poco más para ingresar en la frontera Las Chinamas debido a que, por las medidas impuestas a raíz de la pandemia, su novia de origen colombiano, Lised Posada, no pudo renovar el carné de residente estando fuera del país, por lo que tuvieron que pasar dos noches durmiendo en el auto y el piso, aunque finalmente las autoridades migratorias les ayudaron.
La pareja estuvo 10 días en el centro de contención, mientras que Henry Hernández y Ricardo Mira, ambos jugadores del Deportivo Malacateco, permanecieron recluidos por nueve días, al ser enviados ayer todos a sus casas.
“Ya salimos, al fin”, informó ayer Tony Rugamas a Diario 1, confirmando que es “negativo para coronavirus”.
Ahora, el jugador y su novia ya se encuentran en su casa ubicada en las cercanías de San Juan Opico.
Los tres jugadores han sido llamados a la Selecta por el técnico mexicano Carlos de los Cobos.