El Salvador
sábado 23 de noviembre de 2024

Para unos es solo fútbol, para otros una oportunidad

por Astrid Mejía


La pareja no puede entrar al estadio, pero aprovecha para sacar unas monedas en los partidos de la Selecta.

En el alboroto que se suele generar en el estadio Cuscatlán para los partidos de la Selecta, llama la atención una pareja que va agarrada de la mano, con aspecto harapiento, a quienes la mayoría ve de reojo, pero son ellos quienes se encargan de recoger las latas y otros materiales plásticos que los aficionados dejan tirados en los alrededores del recinto deportivo.

Ellos son Daniel y Carmen Teresa, a quienes el dinero no les alcanza para pagar una entrada de $5, $8, $10, $15 o $20 para ingresar al estadio a apoyar a la Selecta en el último juego del año contra República Dominicana, pero eso no les quita les ánimo para sumarse a la fiesta deportiva.

Carmen Teresa, quien vive en las calles desde niña, se ha puesto la bandera azul y blanco en la cabeza, sujetada con una vincha que dice “El Salvador”. Ella sabe que no puede entrar al estadio, pero vive la fiesta a su manera.

Mientras la mayoría se embriaga en los parqueos del recinto deportivo, esperanzados a que la Selecta gane esta vez, Daniel y Carmen Teresa ven en la lata que el aficionado arroja una oportunidad para sacar algunas monedas.

“Nosotros nos rebuscamos para sacar un par de coras”, dice Teresa. “Desde chiquitos andamos aquí, desde como los cinco años”, agreda su pareja, quien la abraza.

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Daniel y Carmen Teresa solo han podido entrar una vez al estadio Cuscatlán a ver a la Selecta. Foto Astrid Mejía

Pero debido al “mal aspecto” que generan, al vivir en las calles de la capital, la pareja lamentó que el personal de Estadios Deportivos de El Salvador (EDESSA) los quisiera sacar ayer del estadio Cuscatlán.

“Nos dijeron que nos salgamos solo porque andamos recogiendo latas, y siempre nos pasa lo mismo”, se quejó Daniel. “A los peleoneros no les dicen nada, ni a los que se ponen bolos”, agrega Teresa.

“Nosotros lo único que hacemos es recoger latas y después las vamos a vender cerca de aquí para poder comer”, explica Daniel.

De todos los años que llevan realizando esta tarea en el estadio, la pareja afirma que solo una vez han podido entrar a ver un partido al Coloso de Monserrat, pero no recuerdan a qué partido, sin embargo, son ellos quienes realizan el acto más noble de “patriotismo” al recoger lo que para otros es basura y contribuir con ello, en alguna medida, a la sostenibilidad ambiental.

“Con ella entramos una vez a ver el partido y fue bien bonito”, dice sonriente Daniel, pero “siempre le ganan”, afirma Teresa. “No. Siempre gana El Salvador”, refuta Daniel.