La selección colombiana de fútbol masculino empató este domingo 2-2 contra Japón en partido del Grupo B de los Juegos Olímpicos de Rio-2016.
Colombia realizó un pobre encuentro pero se puso en ventaja 2-0 en la segunda mitad gracias los tantos de Teo Gutiérrez (58) y un esperpéntico autogol de Fujiharu (65) pero Japón no se rindió y recortó diferencias justo después con una gran triangulación obra de Asano (67).
Nakajima, con un potente disparo que entró tras chocar contra el larguero, puso el 2-2 definitivo a los 71 minutos.
Con este resultado, Nigeria lidera la llave con 6 puntos tras derrotar más temprano 1-0 a Suecia. Colombia es segunda con dos unidades y Japón y los europeos cierran el grupo, con uno. Los africanos ya están clasificados para cuartos de final.
El encuentro empezó lento, falto de intensidad, con ambos equipos nerviosos y sin querer correr riesgos. Tímidos y faltos de ideas, el tiempo pasó despacio entre pases horizontales y bostezos en la grada.
Solo un tiro de Miguel Borja animó a la fanaticada, que empezó a crecerse cuando los nipones subieron el ritmo.
A la media hora de juego, los asiáticos avisaron a pelota parada y, tres minutos después, gozaron de una doble oportunidad a la salida de un saque de esquina: primero remató flojo y luego, a quemarropa, mandó el balón fuera.
Los japoneses se habían adueñado del balón y de las oportunidades. Colombia aguantaba encerrada en su área pero ¿cuánto tiempo? Por lo menos hasta el descanso…
El seleccionador cafetero, Carlos ‘Piscis’ Restrepo, detectó la inferioridad de los suyos en los primeros 45 y realizó dos cambios en la reanudación. Pero nada cambió.
Asano estrelló el balón en el larguero pocos segundos después y, en el 48, pudo adelantarse de nuevo pero no supo. Ganaba a los puntos pero no noqueaba. Y cuando no derribas a tu rival te arriesgas siempre a que éste te sorprenda.
Así, a los 58, Teo Gutiérrez conectó una fantástica pared en la frontal con un compañero y remató con veneno. La pelota se estrelló en un zaguero y el arquero, desprevenido, nada pudo hacer. Colombia se había adelantado sin hacer nada.
Y como toda situación que va mal es susceptible de empeorar, el defensa japonés se introdujo a los 65 el balón en su arco. Estaba solo, sin nadie alrededor pero en una mezcla entre perder el control y tropezarse la metió en su portería.
Los nipones no tenían suerte pero sí fe y, así, Asano redujo distancias y Nakajima, con un maravilloso disparo desde fuera del área que superó por encima al adelantado Cristian Bonilla, firmó de nuevo las tablas. Se hacía justicia por lo visto en el campo.
Los asiáticos no se conformaban. Querían los tres puntos y en un mano a mano pocos segundos después pudieron conseguirlo, pero un zaguero cafetero despejó en la línea.
El tiempo siguió corriendo pero el resultado ya no se movió.
En la última fecha, el miércoles, Colombia se medirá a la ya clasificada Nigeria mientras que Japón chocará con Suecia por un puesto en cuartos de final.