El portero del Real Madrid y de la selección española, Iker Casillas, aseguró este miércoles que se ve «fuerte» para seguir siendo el guardameta de la Roja y dice que habrá una «transición buena» con su sucesor.
«Creo que va a ser una transición buena, evidentemente no duro toda la vida, no soy inmortal», dijo Casillas durante un acto publicitario, al ser preguntado sobre unas declaraciones del seleccionador Vicente del Bosque.
Del Bosque justificó la sustitución de Casillas por David de Gea en el partido clasificatorio para la Eurocopa-2016 del domingo pasado frente a Luxemburgo (victoria 3-0) afirmando: «Ya he dicho en varias ocasiones que la transición (de Casillas) debe ser dulce».
«Siempre y cuando jueguen en sus clubes tendrán las puertas abiertas de la selección, pero de momento tenemos tiempo por delante para que De Gea y Casillas puedan jugar», añadió el seleccionador español.
«Es ley de vida, tengo 33 años y no voy a poder jugar al fútbol todo lo que me gustaría. Hay gente que viene con muchas ganas, que ya son una realidad como David (De Gea) o Kiko (Casilla). No me lo tomo para nada mal en ningún momento», afirmó el portero del Real Madrid.
«A día de hoy me veo bien y fuerte para ayudar a mi país, para estar en la Eurocopa de Francia y luchar por ganar el título que no va a ser fácil porque hay otras selecciones muy fuertes», matizó Casillas.
La actuación del guardameta fue puesta en entredicho tras el partido de clasificación para la Eurocopa-2016 frente a Eslovaquia el pasado jueves, cuando un fallo suyo propició el primer gol de los eslovacos que acabaron ganando 2-1.
Casillas admitió que tras este partido, se le pasó por la cabeza dejar la selección, pero que todo era fruto de un enfado. «Mi idea es continuar y estar el máximo tiempo posible» en la Roja, aseguró.