El Bayern Múnich consolidó su posición de líder del grupo E de la Liga de Campeones tras vencer este martes al CSKA Moscú por 1-0, en la segunda jornada de la máxima competición europea.
El autor del tanto fue Thomas Müller, de penal en el primer tiempo (minuto 22) cometido sobre Mario Götze.
El campeón alemán, uno de los máximos favoritos al título europeo esta temporada, no pasó por grandes apuros en un estadio moscovita vacío, debido a que el encuentro se jugó a puerta cerrada por una sanción al CSKA por el comportamiento racista de sus seguidores.
El equipo de Pep Guardiola suma seis puntos en dos jornadas y se coloca en una buena posición para lograr la clasificación, con tres puntos más que la Roma, que juega este martes ante un Manchester City que perdió con el Bayern en la primera jornada y que está casi obligado a ganar para no quedar casi al borde de la eliminación.
Pese a no contar con el francés Franck Ribery y el centrocampista Bastian Schweinsteiger, ambos lesionados, el Bayern se mostró muy superior al equipo ruso y dispuso de varias ocasiones para haber logrado un marcador más amplio.
Pese lo ajustado del resultado, los jugadores del Bayern mantuvieron la posesión del balón y controlaron el ritmo del partido, impidiendo a los rivales que se acercaran con peligro al arco de Manuel Neuer.
«Siempre es difícil ante un equipo tan defensivo, pero hemos sabido ser pacientes y hemos tenido ocasiones para haber marcado más goles», destacó Guardiola al término del partido.
El entrenador también se refirió al hecho de haber tenido que jugar sin público: «Es realmente extraño jugar sin aficionados, el fútbol es para el público, no para nosotros».