Las expectativas del Mundial Brasil 2014 no han sido favorables para los dueños de restaurantes y de bares, porque no ven reflejado en ventas las promociones que ingeniaron para atraer a los comensales y mantenerlos en su “cancha”, como ellos llaman a su negocio.
Siempre en los mundiales, los dueños de esos lugares se preparan con anticipación para vestir de gala sus negocios y volverlos más atractivos para los clientes.
De ahí que los pintan, decoran con colores mundialistas e instalan pantallas gigantes de ser posible en los cuatro puntos cardinales, para que los parroquianos no se esfuercen en ver una jugada y con ello evitan que haya hacinamiento, si fuera el caso en que haya un solo televisor, y todos tengan que aglomerarse para gritar un gol.
Lo que resienten los comerciantes es que esa inversión retorna pero a largo plazo y con otros eventos muy alejados de los partidos mundialistas y mucho menos de los equipos locales. Las pantallas, al final, sirven para ver videos musicales o para que un valiente azuzado por las copas cante una canción por medio de karaoke y muy alejado del estilo de «Chente» Fernández o de Juan Gabriel.
Pedro Dalmau, presidente de la Asociación de Restaurantes de El Salvador, reconoce que se ilusionan con la llegada de un nuevo mundial, más aún si la sede es en América o en un continente cuyo horario sea favorable a sus intereses, en especial, si los partidos son después de las 4:00 de la tarde.
Con mucha tristeza dijo que el Mundial de Japón no les generó nada de ingresos porque los partidos eran de madrugada. “La inversión la recuperamos a largo plazo y ni café vendíamos”, detalló.
Cada quien trata de que su «cancha» quede bien decorada, pero este horario de 10:00 de la mañana y 2:00 de la tarde no ha sido nada bueno para los dueños de restaurantes y bares, ya que los lugares se ven vacíos, salvo el sábado y el domingo que hay un ligero incremento porque la mayor parte de personas descansan.
“Esperamos que el avance a octavos, cuartos de final, semifinal y final nos ayude a mejorar la ventas. Cada quien hace su promoción a su manera en comida y bebida, de ahí que surgen platillos y bebidas exóticas mundialistas y por lo menos en Café Don Pedro, tenemos las costillas goleadoras y el trío mundialista”, detalló Dalmau.
Otros restaurantes ofrecen descuentos especiales a las personas que visten la camiseta de su equipo preferido, que bien puede ir de un 10 o un 15 por ciento.
Por lo menos en Caliches las caipiriñas están a dos por uno y la cerveza nacional en promoción de balde; pero pese a ello las expectativas no se han cumplido.
“He preguntado a los dueños de otros negocios y me confirman que las ventas se mantienen y que únicamente el sábado hay un leve incremento. Esperamos un crecimiento de un 15 por ciento pero creo que nos quedaremos esperando, salvo de lo que pueda ocurrir conforme avance el mundial”, afirmó el presidente de la Asociación de Restaurantes de El Salvador.
“Únicamente los que tienen negocios de sport bar verán incremento en sus ventas por el mismo ambiente del lugar, pero ello dependerá de las promociones que pongan en comida y bebida. De mi parte, con mantener el mismo ritmo en venta de comida ya es ganancia, los televisores son un valor agregado, pero no me genera mayores ingresos”, puntualizó Dalmau.
Por su parte, Doris Elizabeth Ramos gerente de ventas de Ola Betos Santa Elena afirmó a Diario1.com que el mundial no les ha generado ningún ingreso extra y que además no tienen ninguna promoción alusiva al mundial.
“Este negocio es de tipo familiar y no nos visitan por vender cerveza o comida en promoción. Ni el fin de semana nos visitan para ver partidos y por lo menos no me han dado ninguna instrucción para colgar promociones”, sentenció Ramos.
Mientras tanto, Julio Antonio Flores, gerente del restaurante el Búfalo Wings Santa Elena, reveló no tener incremento en ventas producto del mundial y “aquí se llena por los empleados que prefieren nuestra comida en el almuerzo y por la noche es un ambiente más familiar. No nos visitan por ver partidos”, dijo.
“La única promoción que tenemos es la venta de una platillo llamado Chunks y se da adicionalmente un balde de cerveza nacional. Solamente el sábado a veces hay un leve incremento de personas a la hora de un partido, pero hasta ahí no más”, detalló Flores.