El argentino Diego Simeone no pudo finalmente convertirse este sábado en el tercer entrenador no europeo en ganar la Liga de Campeones, tras sus compatriotas Luis Carniglia y Helenio Herrera, después de la amarga derrota del Atlético por 4-1 ante el Real Madrid.
Lo tuvo cerca, ya que su equipo fue por delante en el marcador hasta el 90+3, cuando Sergio Ramos forzó la prolongación.
Podía lograrlo casi medio siglo después, pero el torneo seguirá con su tradición de entrenadores campeones europeos. El último que no lo era fue Herrera, que guió al Inter de Milán italiano al título en 1964 y 1965.
Antes, Carniglia había hecho campeón al Real Madrid en los años 1958 y 1959, en los primeros compases de la competición, cuya primera edición había tenido lugar en 1956.
Otros argentinos han aspirado, sin suerte como Simeone, a ser campeones desde entonces, como Héctor Cúper, que con el Valencia alcanzó las finales en 2000 y 2001, perdiendo en ellas ante el Real Madrid y el Bayern de Múnich, respectivamente.
El Atlético había disputado anteriormente una final y lo había hecho también con un entrenador argentino, Juan Carlos ‘Toto’ Lorenzo, con el que había caído en la edición de 1974 ante el Bayern de Múnich.
El éxito del Real Madrid sobre el Atlético de Simeone permitió un récord para su entrenador, Carlo Ancelotti, que sumó su tercer título como entrenador en este torneo, igualando la plusmarca del inglés Bob Paisley.