Por medio de una rueda de prensa, el Gabinete de Seguridad informó sobre la localización de la colombiana Margaret Lizeth Chacón Zúñiga, quien es acusada de haber participado en el asesinato del fiscal Antimafia de Paraguay, Marcelo Pecci, hecho que ocurrió el pasado 10 de mayo de 2022 en Cartagena, Colombia.
“Recibimos información de INTERPOL Colombia de que una de las involucradas en este cobarde asesinato ingresó al país el 26 de mayo de 2022 y ha estado realizando viajes a diferentes países de América Latina, excepto a Colombia”, detalló el ministro de Justicia y Seguridad Pública, Gustavo Villatoro.
La mujer fue detenida en colonia La Cima, en San Salvador. Ella se había ocultado en una casa de dicho lugar con ayuda del salvadoreño Wilber Giovanny Rodríguez Huezo, quien también fue detenido por las autoridades.
“Esta persona le había estado colaborando a esta señora en cuanto al ocultamiento y la colaboración directa para que ella pudiera movilizarse en El Salvador. Él (Rodríguez Huezo) ha sido detenido por agrupaciones ilícitas y será sometido a la justicia salvadoreña”, indicó el director de la PNC, Mauricio Arriaza Chicas.
Asimismo, el funcionario dijo que la mujer será repatriada a Colombia y continuará con el proceso legal en su país.
También, las autoridades indicaron que las investigaciones arrojaron que Chacón Zúñiga es señalada de haber prestado su vehículo al empresario que financió el crimen de Pecci.
El fiscal paraguayo fue asesinado a sangre fría el 10 de mayo de 2022 mientras se encontraba de luna de miel en el país de Colombia. Él junto a su reciente esposa estaba en un hotel reconocido de la localidad turística de Barú, cerca de Cartagena, cuando un sicario bajó de una moto acuática y le disparó a quema ropa, quedando tendido en la arena.
Pecci lideraba numerosas investigaciones contra la mafia, el narcotráfico y el lavado de dinero en Paraguay, indicó la BBC.
Quienes lo ejecutaron
Con relación a este caso, ya habían sido capturadas al menos siete personas involucradas, seis de ellos de nacionalidad Colombiana y uno de ellos venezolano, capturados en diferentes operativos en Colombia, según datos de la BBC y la DW.
De todos ellos, solamente un acusado no quiso aceptar su responsabilidad en el crimen, y se trata de Francisco Luis Correa, quien está perfilado como exmiembro de la banda criminal «Los Paisas» con un largo historial delictivo.
Correa «fue la persona que estructuró esa operación con unos sicarios que llegaron a Cartagena desde Medellín», detalló el fiscal general de Colombia, Francisco Barbosa.
Además de las confesiones de los implicados, la Fiscalía colombiana también cuenta con otro tipo de evidencias, desde comunicaciones interceptadas hasta imágenes de cámaras de seguridad.
Según las confesiones, en muchas ocasiones los sicarios se sintieron perdidos en varias ocasiones con el paradero de su víctima, sin embargo, fueron las publicaciones en redes sociales de la esposa de Pecci, la periodista Claudia Aguilera, las que habrían ayudado a los sicarios, según indican los detalles de la investigación.
«Publicar en redes sociales sin responsabilidad puede convertirse en un arma letal. Los delincuentes manifestaron que en muchas ocasiones estuvieron perdidos, pero que gracias a las redes sociales lograron la ubicación del fiscal Pecci», afirmó el fiscal Barbosa.
Este violento crimen fue financiado con más de 2.000 millones de pesos colombianos (US$ 528.000) que se repartieron entre varias personas, detalló el fiscal colombiano.
El fiscal lideraba numerosas investigaciones contra la mafia, el narcotráfico y el lavado de dinero en Paraguay, entre ellas una contra el Primer Comando de la Capital de Brasil.
Con base en Sao Paulo y unos 30.000 integrantes, el PCC mueve más de US$80 millones al año, según cálculos de la policía brasileña, en sus operaciones de narcotráfico, robos, secuestros y asaltos a entidades bancarias.
El director de la policía colombiana señaló a esta organización como la principal sospechosa del asesinato.