Twitter no era una red social frecuentada religiosamente por Mario Alberto Huezo, ya que su cotidiana actividad ociosa la basaba en Facebook, como demuestran sus constantes publicaciones en una página de videojuegos.
No obstante, cinco días después del asesinato de su compañera de vida, la periodista de La Prensa Gráfica Karla Turcios, Huezo se abocó a Twitter a dejar tres desconcertantes mensajes, aparentemente mostrando angustia sobre como afrontará la crianza de su hijo sin su cónyuge.
Lo anterior denotaba inestabilidad en el comportamiento de Huezo, de quien las autoridades ya empezaban a sospechar como el principal sospechoso del asesinato de la periodista, basándose entre otras pruebas, en sus publicaciones de Facebook.
“Si alguno de mis contactos que comparto con Karla Turcios ha tenido contacto con ella desde las 12:30 del medio día o alguien que la conozca, por favor hacérmelo saber, Marito y yo estamos en casa y estamos bien, pero de ella no sabemos nada…” fue la publicación con la que Mario Huezo alertó de la desaparición de su pareja, alrededor de doce horas después de que presuntamente la matara, según las investigaciones policiales.
Este mensaje alertó a los amigos de Turcios y a la mayoría de medios de comunicación, ya que la desaparición de la periodista y el posterior hallazgo de su cadáver se convirtieron en la noticia que marcó la agenda del pasado 15 de abril.
Ese mismo día, la Policía Nacional Civil llamó a Huezo para reconocer el cadáver de Turcios, algo a lo que se mostró reacio a hacer en un primer momento, según dijo el martes el fiscal general Douglas Meléndez.
Tras presenciar la escena que él habría ocasionado al dejar el cadáver en Santa Rosa Guachipilín, Santa Ana, Huezo empezó a publicar una serie de mensajes en su Facebook, que algunos podrían interpretar como angustia o desahogo, pero que alertaron a las autoridades por revelar aspectos de su relación con Turcios, luego de conocerse su muerte.
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“Hasta que no la vea con mis ojos y toque sus manos no perderé la esperanza”, publicó Huezo en su Facebook personal, cerca de las 2:00PM del domingo 15 de abril. Tres horas después colocó en su muro lo siguiente:
“Me duele en el alma no haberte dado lo que soñaste…y lloro de impotencia el verte así, quisiera oírte de nuevo diciéndome que nuestra boda sería este año y que ya era tiempo de un hermanito para Marito… Y que querías ir donde tu mejor amiga a Nueva York y que envejeceríamos juntos siendo dos viejitos peleando para no aburrirnos”.
A medida que más detalles del caso se conocían, muchos de los amigos de Huezo empezaron a cuestionar sus publicaciones acerca de la hora en que se había dado cuenta de la desaparición de Karla Turcios y a qué hora lo reportó a la Policía Nacional Civil (PNC).
Para evitar cuestionamientos posteriores, Huezo inhabilitó el acceso a sus publicaciones a todos aquellos que no fueran sus amigos. Al intentar ver sus publicaciones, solo se pueden ver aquellas relacionadas con críticas especializadas a películas de ciencia-ficción.
Uno de los aspectos resaltados por el fiscal Douglas Meléndez en la investigación contra Mario Huezo, fue la descripción que hizo de él: “era un mantenido, pasaba chateando y en juegos telefónicos; no trabaja”.
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La ciencia ficción y los videojuegos eran la afición de Mario y uno de los puntos en común que tenía con Karla. Una de las páginas que más frecuentaba en Facebook tiene que ver con una comunidad de jugadores del popular juego de combate “Street Fighter”, como se muestra a continuación.
A través del registro de sus movimientos en un vehículo el día del asesinato de Karla Turcios por medio de un circuito cerrado de cámaras, junto el cruce de comunicación telefónica y el rastreo posicional de su teléfono celular, fue como la Fiscalía determinó que Mario Huezo asesinó a la periodista Karla Turcios y procedió a capturarlo, solo momentos después de dar una entrevista a una cadena internacional de noticias.