Para los abogados defensores es una cuestión de lógica: no pueden existir culpables e inocentes a la vez. O todos son culpables, o todos son inocentes. El hecho es legal o ilegal. Así es el planteamiento que hacen.
Los juristas señalan que en uno de los juegos, que la investigación fiscal señala como amañado, estuvieron involucrados jugadores y altos directivos de la federación del fútbol salvadoreño.
Pero en los tribunales solo se ha acusado a jugadores y a empresarios de una promotora de partidos internacionales. Los directivos que firmaron el acuerdo únicamente han servido como testigos en la investigación fiscal.
El partido, al que se refieren los juristas, se disputó en una cancha de tercera categoría, el 12 de octubre de 2010, en Ciudad Quezada, Costa Rica.
Todo comenzó cuando Yasser Arauz, un nicaragüense representante de la promotora Exclusive Sports, llegó a la Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT) para proponer un partido amistoso contra la selección de Costa Rica.
Arauz les aseguró a los dirigentes de la FESFUT que el partido se realizaría con el aval de un agente de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA). Explicó que todo sería legal. Que no habría ningún problema.
De acuerdo con declaraciones del entonces presidente de la FESFUT, Carlos Méndez Flores Cabezas, documentadas en el requerimiento fiscal, el partido correspondía a una fecha FIFA.
En su declaración reconoce que terminaron pactando con la empresa Exclusive Sports porque la promotora Figueroa Gallardo, con quienes habían acordado el partido en un inicio, rompió el contrato a última hora.
La empresa Exclusive Sports fue creada por Wilson Raj Perumal, un singapurense arrestado en Finlandia y condenado en 2011 a prisión por amaño de partidos. En Centroamérica y el Caribe esa empresa era representada por Gaye Allassane, declarado prófugo de la justicia a partir de este miércoles.
Allassane se encargaba de comprar la voluntad de jugadores claves, defensas y porteros, para manipular los resultados de los partidos de selecciones que participan en torneos oficiales de la CONCACAF.
A inicios de septiembre de 2010, Gaye Allassane y un hombre llamado Roy Jepo llegaron a las instalaciones de la FESFUT, en San Salvador, para firmar un contrato y consolidar el encuentro entre ambas selecciones centroamericanas.
El secretario general de la FESFUT, Cesar Saldaña, formalizó los detalles del pacto. Fue entonces que Allassane entregó a los federativos, en su calidad de representante de la Promotora Exclusive Sport, la cantidad de 30 mil dólares en efectivo.
También desembolsó 10 mil dólares para la comprar de los boletos de avión. Ese dinero fue entregado al señor Javier Robertson.
Días después, los dos equipos se hospedaron en el hotel Courtyard Marrio, cercano a la ciudad de San Carlos. Pocos se dieron cuenta que por los pasillos del hotel caminaba Alassane, quien acompañaba a los jugadores salvadoreños.
Un informe de referido hotel consigna que Allassane y Yasser Arauz se hospedaron en el mismo albergue donde se ubicaron los jugadores salvadoreños.
La Fiscalía dice contar con un reporte del ingreso de Allassane vía aérea a El Salvador, pero no tienen registro de algún ingreso de dinero al país.
También aseguran contar con un “boucher” donde se detalla el ingreso de los 30 mil dólares a una cuenta corriente de la Federación Salvadoreña de Fútbol.
Foto D1: Nelson Dueñas.
Alegatos en el juicio
Este miércoles, en el inicio de la audiencia preliminar contra once exseleccionados y tres extranjeros, los abogados defensores señalaron que la acusación es una “arbitrariedad”.
“Quiero llamar poderosamente la atención de su señoría, porque efectivamente esto no se ha establecido bajo el principio de legalidad. Ese partido (realizado en Costa Rica) hace una ponencia en la acusación como si una parte de ese partido fue legal y la otra no”, expresó René Chiquillo, abogado defensor de Dagoberto Portillo y Dennis Alas.
Agregó que “pareciera que la participación de los ciudadanos (futbolistas) fuera ilegal y que la participación de los federativos de fútbol sí fuera legal”.
Nelson García, abogado defensor de Osael Romero, indicó que si bien la Fiscalía asegura tener constancia que los 30 mil dólares ingresaron a una cuenta de la FESFUT, aún no se ha probado “la licitud a través del sistema financiero”.
“Si ese dinero circuló, como está probado por el mismo Ministerio Público, tiene que decir que ahí se constituyó lavado de dinero. Y más aún, ese dinero para provocar el juego en Costa Rica también es ilícito porque es parte de ese engranaje de apuestas”.
Sobre los argumentos de los abogados defensores, el fiscal del caso Julio Zamora se limitó a decir que «es un planteamiento que han hecho y que tendrá que valorar el señor juez. Ya eso no me corresponde a mí».
Al preguntarle si piensan investigar a los exdirectivos de la federación de fútbol, Zamora acotó: «no se sabe porque ahí ya es otro tema».
Los cuestionamientos de Yasser
Yasser Arauz, el nicaragüense que la Fiscalía acusa de lavar dinero para amañar el partido contra Costa Rica, se sentó al final de la sala de audiencias. Vestía una camisa celeste y un pantalón gris formal.
Después de negociar con su abogado defensor, el nicaragüense aceptó hablar con rapidez durante el primer receso que otorgó el juez. La plática duró poco más de tres minutos.
Yasser, en una entrevista con un diario nicaragüense aseguraste que la federación salvadoreña fue quien recibió el dinero del partido contra Costa Rica. ¿Cómo fue la negociación?
Veamos. Numero uno. Solo pregúntate, ¿la federación firmó el contrato? sí ¿Y por qué no están aquí entonces? Número dos. ¿La federación dice que fue obligada a firmar ese contrato? No. Número tres. Fue la federación quien recibió el dinero. En ningún momento dice que fueron los jugadores.
¿Los fiscales dicen que usted propuso el partido contra Costa Rica?
La federación del fútbol de aquí aseguran que al firmar el contrato lo hicieron de buena fe, de la misma manera obré yo al irles a proponer el encuentro.
Usted ha dicho que únicamente sirvió como traductor. ¿Es así?
Es que si yo vengo a ti y te digo que necesito un traductor, y te pregunto si hablas árabe, y luego te digo que necesito un traductor para hablar con cierta federación, y te digo que te voy a pagar mil dólares por eso. ¿Cómo no vas hacer trato? Pero más allá de eso, ¿qué poder puedo tener para decidir sobre una federación, o para que ellos manipularan la situación a mi favor?
Cuestionabas el porqué no están los federativos en el juicio. ¿Qué piensas que en lugar de eso han servido como testigos en contra de ustedes?
Por eso. ¿Por qué ellos no están aquí? Yo lo que creo es que con esto están tirando un precedente para que en un futuro esto no vuelva a pasar. Esa es mi percepción. Pero en definitiva es un circo mediático. Los medios llegaron a tal punto de presionar tanto que obligaron a la Fiscalía a llegar hasta aquí.
El 90% de lo que habló el fiscal no es ilegal en este país. Suponete que todos los arreglos y amaños son ciertos. ¿Dónde están esas pruebas? Si dicen que se lavó plata, ¿dónde está la procedencia de esa plata? Si dicen que yo tengo algo que ver, ¿dónde están las pruebas que yo le di un peso a alguien, que yo recibí o le dije vamos hacer esto o aquello? Aquí lo único que hay es un documento donde dice que yo fui testigo de un acuerdo ¿Por qué fui testigo? porque yo fui el traductor entre las dos partes. Únicamente.
En ese momento el juez reanuda el juicio. Le pido a Yasser una entrevista más prolongada para después de la audiencia. Guarda silencio. Y luego, en el momento que me levanto de la silla, dice:
– Dale. El que no la debe, no la teme.
Foto D1: Nelson Dueñas. Yasser Arauz, nicaragüense implicado en el caso de amaños.