El Salvador es un país miembro de la Organización de las Naciones Unidas, por lo cual es importante que la sociedad salvadoreña conozca que en el Estudio sobre todas las formas de violencia contra la mujer, del Informe del Secretario General de la Asamblea General de las Naciones Unidas, de fecha 6 de julio de 2006, se enunciaron las distintas formas de violencia que padecen las mujeres alrededor del mundo.
La primera de ellas, la cual es la más común en El Salvador es la Violencia contra la mujer en el ámbito de la pareja. Esta violencia es a la vez la más sutil de las violencias, pues se hace dentro del ámbito de pareja y familia, dichas características son las que provocan que las mujeres víctimas de sus parejas sean revictimizadas constantemente, así mismo a través de los procesos de socialización los niños que crecen en ese tipo de cultura de la violencia son los que reproducen este tipo de violencia en su etapa adulta.
Este proceso de violencia de pareja desencadena en la Violencia contra la mujer dentro de la familia. Esta violencia es de tipo socio-cultural, pues es la repetición de la cultura de violencia vista en la casa y se traspasa a la sociedad, las características principales de esta violencia se dan a lo largo de la socialización de la mujer, es decir desde su nacimiento hasta la muerte, los casos más visibles de esta violencia son las mutilaciones genitales, violencia física, infanticidio femenino, abuso sexual de las niñas en el hogar, matrimonios forzados o la violencia ejercida por otros miembros de la familia.
Estas manifestaciones agresivas son más visibles en la Violencia contra la mujer en la comunidad. Pues ahí se aprecia y legitima el feminicidio, violencia sexual, acoso sexual callejero y violencia en el lugar de trabajo, prostitución forzada, trata de blancas, torturas, desfiguración, explotación sexual, desapariciones, prisiones arbitrarias, matrimonios o embarazos forzados, et
Por lo tanto es responsabilidad de la comunidad y la sociedad salvadoreña erradicar en el país estos tipos de violencia, ya que como se puede analizar cada una de esas manifestaciones de violencia contra la mujer se hace presente en el territorio salvadoreño y en lugar de disminuir va en aumento y sobretodo tiene mayor difusión periodística, provocando la desensibilización de las personas al verlo como algo normal, o peor aún legitimar esos actos de violencia, como algo que la mujer se buscó o se merecía.