El orden público es la situación del normal funcionamiento de una sociedad en donde las autoridades ejercen sus atribuciones propias y los ciudadanos obedecen las normas emanadas de estas. Todo para poder vivir en paz, armonía y civilidad.
El orden público es algo completamente esencial en una organización social, ya que no es posible una convivencia ciudadana pacífica, si no existe respeto a las leyes por parte de una comunidad.
Sin orden público, los ciudadanos podrían terminar desencadenando caos y anarquía, tal como existe actualmente en algunas naciones de África, en las calles de San Salvador o en las principales arterias de Santa Tecla, las cuales han sido tomadas por comerciantes informales, en donde impera la ley del más fuerte, generan toneladas de basura que se riegan libremente por las calles, se comercian mercaderías de dudosa procedencia y se evaden impuestos, tanto estatales como municipales.
Resolver el desorden en nuestras ciudades necesariamente pasa por la lamentable tarea de desalojar los comerciantes informales de las calles. Entendemos sus preocupaciones y nos solidarizamos con ellos y sus familias; pero a la vez estamos claros que no se puede perder de vista que el beneficio de unos pocos, no puede ser más importante que el beneficio de muchos.
El orden y limpieza en nuestras calles, el imperio del derecho y la civilidad es algo por lo que todos los ciudadanos debemos aspirar y por lo que todos debemos estar dispuestos a luchar.