El delegado de la empresa privada en la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (SIGET) fue excluido de forma maliciosa por parte del gobierno al utilizar un mecanismo fraudulento. Crearon malintencionadamente 62 nuevas asociaciones vinculadas al FMLN, las cuales no poseen ningún tipo de representatividad dentro del sector productivo.
Las entidades recién creadas fueron formalizadas por cinco abogados el mismo día e inscritas todas en tiempo récord, menos de un mes, listas ya para poder votar por el candidato elegido por el oficialismo.
Lo alarmante de la situación es que la SIGET otorga accesos a Internet, celulares, frecuencias de radio y televisión, por lo que bajo el control total de un gobierno que tiene regímenes tiránicos como el Cuba y Venezuela como referentes puede utilizar a la entidad como instrumento expropiatorio, o peor aún como censura de medios informativos adversos y así atentar contra la libertad de expresión del pueblo salvadoreño derecho al cual es un pilar a la democracia.
Hace 26 años, en los Acuerdos de Paz, todos nos comprometimos a respetar el sistema democrático, la alternancia en el poder, la libre expresión, el respeto al Estado de Derecho de la propiedad privada. Si los antiguos defensores de los intereses del pueblo olvidaron sus ideales y sus compromisos, aquí está la sociedad civil para recordárselos. Violentar el Estado de Derecho no es vivir en democracia.