El presidente Nayib Bukele prometió este sábado «sanar» la economía después de curar al país del «cáncer» de la violencia que generaban las pandillas.
«Ahora, que ya arreglamos lo más urgente, que era la seguridad, vamos a enfocarnos de lleno en los problemas importantes, empezando por la economía. Y quizá en este nuevo tratamiento para sanar la economía, también haya que tomar medicina amarga”, dijo el mandatario en su discurso de investidura para un segundo mandato consecutivo.
Bukele dijo ante cientos de personas, entre invitados especiales y seguidores, desde el palco del Palacio Nacional, que «la sociedad salvadoreña sigue enferma, pero ya no tiene cáncer» y que «sigue enferma de las demás cosas que siempre ha tenido», porque «el país ya se curó de las pandillas y ahora quiere curarse de la mala economía».
Tras resolver el problema de las pandillas, el mandatario aseguró que su principal objetivo para este segundo periodo al frente de la Ejecutivo será solventar los problemas económicos del país, para lo cual no descarta recurrir a la “medicina amarga”.
Señaló que hace más de 30 años surgió un problema más grande, el cáncer de las pandillas. Ningún gobierno pudo combatirlo. «Hace cinco años, en esta misma plaza, les pedí que confiaran, que defendieran nuestras decisiones, aunque sonaran a medicina amarga, también les dije que habría que tomar de esa medicina”.
Bukele fue juramentado este sábado como presidente de la República para un segundo mandato consecutivo de cinco años (2024-2029).