La comisionada presidencial de Operaciones y Gabinete de gobierno, Carolina Recinos, enfatizó este viernes que las relaciones entre El Salvador y los Estados Unidos, son del tipo “gobierno a gobierno”, pero que se respeta cualquier valoración de otros representantes del espectro político estadounidense.
“Las relaciones entre El Salvador y Estados Unidos son entre gobiernos, no son particularmente entre congresistas, a quienes nosotros respetamos, son parte de las representaciones políticas que tiene el gobierno hermano de Estados Unidos”, dijo la líder del gabinete, en declaraciones a la prensa.
Las palabras de Recinos se dan en respuesta a un pronunciamiento del congresista federal de Estados Unidos, Adam Kinzinger, del Partido Repúblicano, quien el pasado miércoles, durante una audiencia con el Secretario de Estado, Anthony Blinken, pidió nombrar “un embajador fuerte” en El Salvador.
Similar deseo compartió Recinos: “Esperamos que nombren al mejor de los embajadores. Con cualquiera que venga aquí, vamos a tener relaciones sólidas y constructivas y vamos a llevar a cabo ese proceso que ya ha llevado fruto a El Salvador”, expresó.
Además consideró al gobierno estadounidense como “hermano” y resaltó que el gobierno de Nayib Bukele reconstruyó las relaciones que sus antecesores habían roto: “Estas relaciones se fueron reconstruyendo, las encontramos prácticamente perdidas y tenemos en Estados Unidos un socio confiable con el que queremos construir iniciativas y llevando a cabo proyectos que beneficien a nuestro país y que beneficien a los Estados Unidos”, sostuvo.
Reiteró también en el respeto hacia las opiniones de congresistas y senadores federales estadounidenses, que en el último tiempo han emitido sus valoraciones sobre la realidad sociopolítica del país: “Las opiniones acerca de El Salvador y la región son respetables, nosotros tenemos nuestros propios procesos. Estamos llevando nuestra democracia y seguimos actuando en el marco de la Ley”, subrayó.
Desde el 20 de enero, cuando Joe Biden asumió la presidencia de Estados Unidos, el Ministro Consejero de la Embajada Estadounidense en el país, Brendan O’Brien, asumió como Encargado de Negocios, a la espera que el presidente envíe al Senado la propuesta de un nuevo embajador.
A partir de entonces, O’Brien ha sostenido reuniones con actores políticos y empresariales del país, así como con miembros del gabinete de gobierno. En dichas reuniones, ha externado su apoyo al proceso democrático en El Salvador.
Del aproximado de 3.5 millones de personas que componen la diáspora salvadoreña, 3 millones viven en EE.UU, que aportan en concepto de remesas, cerca del 20% del Producto Interno Bruto (PIB) del país.