Robert Menéndez, un influyente miembro del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos, hizo público a través de una carta que envió al Secretario de Estado estadounidense, Michael Pompeo, una serie de preocupaciones por el sistemático debilitamiento del Estado de Derecho y ataques a los medios de comunicación independientes en El Salvador por parte del presidente Nayib Bukele.
“Dado los eventos que han estado sucediendo en El Salvador, ya es hora para que los Estados recalibre su posición con El Salvador y priorice aquellas políticas diseñadas para reforzar y apoyar el respeto a la institucionalidad y la ley”, dice Menéndez en la misiva.
El senador estadounidense reclama a la administración Trump que ponga atención al debilitamiento de la institucionalidad democrática en El Salvador desde el ingreso al poder del presidente Nayib Bukele.C ita un reporte que hay sobre las acciones altamente irregulares del gobierno del presidente Bukele con malos manejos y posible corrupción con los fondos del Covid-19, además del preocupante descubrimiento de las negociaciones del gobierno de Nayib Bukele con la MS-13 para adelantar las ambiciones electorales de su partido Nuevas Ideas.
Adicionalmente a esto, agrega, se suman los ataques injustificados del presidente Bukele contra los medios y las organizaciones independientes de medios que descubrieron y sacaron a la luz esas negociaciones secretas con la MS-13. El senador Menéndez ha condenado totalmente el silencio de la administración Trump ante tantos retos que Bukele le ha puesto a la democracia de El Salvador.
Al cierre de la carta, Menéndez también instó al Secretario de Estado, Michael Pompeo, a que se pronuncie claramente en apoyo al Fiscal General de El Salvador, Raúl Melara, y que reconfirme el apoyo que Estados Unidos siempre va a dar a una sociedad libre con balance de poder y con una prensa independiente como un pilar central para la salud de la democracia en El Salvador.
La carta envida por el senador Robert Menéndez al secretario de Estado
Diciembre, 3, 2020
Honorable Michael Pompeo
Secretario de Estado
Secretario Pompeo:
Le escribo para expresar mi preocupación por la falta de respuesta de la administración Trump a los continuos desafíos al Estado de Derecho en El Salvador. Desde información preocupante sobre la respuesta del gobierno a la pandemia de COVID-19 hasta detalles profundamente inquietantes de un pacto dudoso entre la administración del presidente Nayib Bukele y la violenta pandilla Mara Salvatrucha (MS-13), los salvadoreños han sido testigos de varios acontecimientos preocupantes en 2020.
Sin embargo, desde que el presidente Bukele utilizó personal militar armado para ocupar la Asamblea Legislativa salvadoreña en febrero, el gobierno de Trump ha guardado un silencio irresponsable sobre el debilitamiento de la gobernabilidad democrática en El Salvador.
El 9 de noviembre, la Fiscalía General de El Salvador inició una revisión exhaustiva de los registros de contratación pública relacionados con la respuesta del presidente Bukele a la pandemia de COVID-19, con fiscales e investigadores registrando las instalaciones del Ministerio de Salud de El Salvador, Instituto de Seguridad Social (ISSS), y otras agencias gubernamentales. Los informes públicos indican que los fiscales de la Fiscalía General de El Salvador están investigando incidentes de irregularidades generalizadas en los contratos relacionados con la respuesta del gobierno de Bukele a la pandemia.
La prevalencia de la mala gestión de los contratos en la respuesta COVID-19 del gobierno de Bukele no solo niega al sistema médico salvadoreño los suministros y equipos médicos adecuados necesarios para enfrentar la pandemia, sino que también socava la confianza de los donantes internacionales que buscan apoyar al pueblo salvadoreño durante este período de crisis de salud mundial.
Estos hechos se producen dos meses después de que los medios de comunicación independientes salvadoreños informaran que el gobierno de Bukele había estado negociando en secreto con la MS-13, acordando finalmente mejorar las condiciones carcelarias para los miembros de la MS-13 a cambio de que la pandilla prometiera una reducción ordenada de homicidios y apoyo electoral del partido político Nuevas Ideas del presidente Bukele en las elecciones legislativas de febrero de 2021.
Como saben, la MS-13 es una de las pandillas más violentas de la historia de El Salvador y es en gran parte responsable de la violencia que ha obligado a cientos de miles de salvadoreños a huir de su país. Si bien ha habido instancias anteriores de negociaciones entre el gobierno salvadoreño y bandas violentas, es alarmante que el gobierno de Bukele parezca haber utilizado tales conversaciones para promover las ambiciones del partido político del presidente.
Además, me preocupa profundamente que el presidente Bukele respondiera a los informes públicos sobre las negociaciones de su gobierno con la MS-13 amenazando directamente al medio de comunicación independiente El Faro y su personal. Los esfuerzos del gobierno de Bukele por intimidar a los medios de comunicación y socavar la libertad de prensa representan serios desafíos para la gobernabilidad democrática en El Salvador.
A pesar de las preocupantes implicaciones para el estado de derecho en El Salvador, la administración Trump ha alternado entre el silencio hacia estos acontecimientos preocupantes y los continuos elogios al presidente Bukele. Tal enfoque difícilmente parece promover los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos o los principios democráticos que sirven como base de nuestra política exterior. Por estas razones, le solicito respetuosamente su respuesta a las siguientes preguntas a más tardar el 15 de diciembre:
¿Cuáles son las implicaciones de los informes recientes sobre la mala gestión del gobierno de Bukele de los fondos de COVID-19 para los esfuerzos de Estados Unidos para apoyar al pueblo salvadoreño durante la pandemia? ¿Tiene el gobierno de los Estados Unidos información sobre la participación de un alto funcionario salvadoreño en la supuesta mala administración de los fondos de COVID-19?
¿Qué esfuerzos ha realizado la administración Trump para investigar las negociaciones entre el gobierno de Bukele y la MS-13? ¿Apoya la administración Trump los intentos del gobierno de Bukele de involucrar a la MS-13 en los esfuerzos de campaña del partido Nuevas Ideas del presidente Bukele antes de las elecciones de febrero de 2021? ¿Se descubrió que alguna ayuda de los Estados Unidos benefició a la MS-13 como resultado de las negociaciones del gobierno de Bukele?
¿Por qué el Departamento de Estado y el embajador de Estados Unidos, Ronald Johnson, han guardado silencio sobre los crecientes desafíos a la democracia y el estado de derecho en El Salvador, y más específicamente, el pacto del gobierno de Bukele con la MS-13?
Dados los eventos en curso en El Salvador, es hora de que Estados Unidos vuelva a calibrar su enfoque y priorice las políticas diseñadas para reforzar el Estado de Derecho. Como parte de este esfuerzo, los animo a ampliar el apoyo de Estados Unidos a la oficina del Fiscal General de El Salvador y a la sociedad civil independiente y los medios de comunicación, controles esenciales del poder del gobierno en cualquier democracia vibrante. El silencio continuo no es una opción aceptable. Gracias por su tiempo y atención a este asunto.
Sinceramente,
Robert Menéndez