El Salvador
lunes 25 de noviembre de 2024

Analista de seguridad de EEUU señala a José Luis Merino como poder oscuro detrás de Bukele

por Redacción


El analista de seguridad de Estados Unidos, Douglas Farah, experto en temas latinoamericanos, señala la participación de José Luis Merino como uno de los poderes oscuros. El presidente Nayib Bukele siempre ha tratado de encubrir esta relación por motivos obvios, ya que José Luis Merino está en la lista Magnitsky y es señalado por ser tesorero de las FARC y está siendo investigado por narcotráfico y lavado de dinero.

Douglas Farah, reconocido periodista y analista de seguridad de los Estados Unidos, aseguró en una entrevista televisiva que José Luis Merino, uno de los máximos dirigentes del FMLN, es el poder oculto detrás del presidente Nayib Bukele.

Farah ha investigado durante años los presuntos nexos de José Luis Merino con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el gobierno venezolano, además de su participación en supuestas redes de narcotráfico.

El analista de seguridad dice que ha habido algunos avances en las investigaciones contra Merino, pero que aún son insuficientes.

“Le han quitado unos cuantos miles de millones de dólares, pero en términos reales es muy poquito”, dijo Farah.

Luego destacó: “Lamentablemente él sigue con un poder real dentro del gobierno de Nayib Bukele. Él maneja muy de cerca muchas de las arcas económicas oscuras que mantiene el gobierno. Tiene gente como Eric Vega, asesor directo del presidente Bukele. También tiene otra compañera muy fuerte que está en el gabinete de El Salvador”.

El problema para Merino, aseguró Farah, es que “el régimen de Nicolás Maduro se dio cuenta de que robó más de 600 millones de dólares de PDVSA, de Alba Pretróleos”.

“Hay una pelea ahí y a lo mejor no sean los gringos quien lo van a agarrar primero, sino los cubanos o venezolanos, porque ellos sufrieron en carne propia las consecuencias de la corrupción de esa red”, dijo.

Sin embargo, el analista de seguridad indicó que Merino sigue teniendo “relaciones muy fuertes” con Iván Márquez, de las FARC, y otros grupos de narcotráfico que manejan “mucho dinero”.

Los nexos con Bukele

La presencia de Erick Vega en el equipo de gobierno de Nayib Bukele revela el estrecho vínculo existente entre la actual administración y las viejas estructuras corruptas del FMLN, dirigidas por el excomandante guerrillero, José Luis Merino, de acuerdo con un informe de Farah.

El asesor de Bukele para inversiones extranjeras es un empresario del consorcio Alba Petróleos, la entidad que otorgó un préstamo de  $1,9 millones al mandatario salvadoreño en 2013, en tiempos en que este último se desempeñaba como alcalde de Nuevo Cuscatlán.

El informe hace mención especial de Vega, dado que este mantiene profundos lazos con la estructura José Luis Merino, su padrino político, además de la relación de amistad y compadrazgo que tiene con Nayib Bukele.

Foto La Prensa Gráfica

Foto La Prensa Gráfica

Antes de la alta posición que hoy ostenta en la administración de Bukele, Erick Vega se desempeñaba como secretario privado y recaudador de José Luis Merino. Ambos son investigados por lavado de dinero.

También es amigo íntimo personal y comercial de Sigfredo Merino. Documentos consultados para la redacción del informe revelan que Vega y Fred Merino mantenían comunicación a través de mensajes de texto y por teléfono, cientos de veces al mes.

Vega y Fred Merino visitaron Caracas en varias oportunidades para reunirse con líderes del régimen de Nicolás Maduro, así como con varios bancos rusos que operan desde la capital venezolana. Para sus viajes, Vega usaba pasaporte diplomático salvadoreño D007371, a pesar de no tener cargo oficial en el gobierno.

Vega es esposo de Diana Echeverría Rais de Vega, sobrina del exempresario de la basura, Enrique Rais, prófugo de la justicia salvadoreña y otro de los operadores de Merino.

Erick Vega integra junto a Pablo Anliker Infante, ministro de Agricultura, y su primo Federico Anliker, presidente de CEPA, la directiva de Precocidos de El Salvador, empresa también beneficiaria de uno los préstamos de Alba Petróleos.

Una nota de El Faro precisa que entre 2013 y 2016, Vega formó parte de la directiva de un conjunto de compañías que recibieron en total $69 millones de financiamiento de Alba: Alba Alimentos ($47 millones), la aerolínea Vuelos Económicos Centroamericanos VECA (adeudaba en septiembre de 2019 $10.7 millones) y Precocidos ($13,9 millones). Estas tres empresas son investigadas por lavado de dinero contra las actividades financieras de Alba Petróleos, según confirmó el 1 de junio del 2019 la Unidad contra la Corrupción e Impunidad de la Fiscalía General de la República (FGR).

Otros analistas también han señalado a José Luis Merino como el poder oscuro en el gobierno de Bukele, quien lo está llevando en la línea de destruir a la empresa privada y buscar el poder total.

Los analistas dicen que las acciones de Bukele dejan clara la ruta: intento de golpe de Estado a la Asamblea Legislativa el pasado 9 de febrero, confrontación constante con los magistrados de la Sala de lo Constitucional y diferencias con el fiscal general de la República.

Además, Bukele ha mantenido un constante enfrentamiento con la empresa privada. A algunos empresarios que han sido críticos con el gobierno los ha perseguido y acosado con auditorías de Hacienda y descalificaciones públicas. Les ha cerrado empresas y los ha acusado de evasores de impuestos sin ninguna prueba.

Es por eso que los analistas señalan que Bukele habría encontrado un cómplice, que tiempo atrás tuvo las mismas aspiraciones, para tomar el poder total. Ese cómplice sería José Luis Merino.

unnamed

¿Quién es José Luis Merino?

José Luis Merino es uno de los líderes históricos del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN). En los años ochenta fue comandante guerrillero por parte de las Fuerzas Armadas de Liberación (FAL), brazo armado del Partido Comunista Salvadoreño (PCS). Su seudónimo fue Ramiro.

Merino aparece en la lista negra de corrupción de los Estados Unidos. Actualmente es uno de los hombres con más poder e influencia dentro del gobierno de Nayib Bukele.

El exguerrillero, conocido como “Ramiro” durante la guerra, es señalado por Washington por haber desviado $400 millones de dinero de Alba Petróleos hacia cuentas offshore en Panamá.

El político salvadoreño ha sido vinculado con la guerrilla colombiana por supuestamente facilitar el lavado de dinero de millones de dólares provenientes de dicha organización y que han sido colocados en países extranjeros, según publicaciones realizadas por Foreign Policy de Washington.

En marzo de 2018 lanzó su candidatura a diputado por el FMLN, pero obtuvo poquísimos votos, quizá por su no tan buena imagen por los  vínculos con el narcotráfico y lavado de dinero, no solo con las FARC sino también con Venezuela.

En la mira de los Estados Unidos

En septiembre de 2017, el investigador del Centro Nacional para Operaciones Complejas de la Universidad de Defensa Nacional de Estados Unidos, Douglas Farah, pidió a la Comisión para el Control Internacional de Narcóticos del Senado estadounidense investigar a PDVSA y sus filiales en El Salvador y Nicaragua por actividades de lavado de dinero.

En su intervención ante el Congreso, Farah calificó a Alba Petróleos en El Salvador como “una parte fundamental de un programa multinacional de lavado de dinero que fue construido y operado por miembros de la alianza bolivariana ALBA”.

Alba Petróleos se creó en 2006 como una sociedad entre PDV Caribe, empresa subsidiaria de PDVSA, y la Asociación Intermunicipal Energía para El Salvador (ENEPASA), conformada por alcaldes de municipios gobernados por el FMLN.

Farah señaló a José Luis Merino como el principal implicado en dirigir las operaciones de Alba Petróleos en el país. Merino buscaba una curul en la Asamblea Legislativa, pero fue víctima de la debacle electoral de su partido en las elecciones legislativas y municipales de 2018.

Fotoarte: D1.

Fotoarte: D1.

Farah señaló a Merino como el aliado de las FARC en El Salvador desde 1994 hasta 2016, siendo un  proveedor clave de armas para los rebeldes colombianos durante ese espacio de tiempo.

En octubre de 2016, la prestigiosa publicación Foreing Policy lanzó un artículo denominado “Para lograr la paz verdadera en Colombia, vayan tras el dinero de las FARC”, en el que se  calificó a Merino como “el hombre de las FARC en El Salvador” y se le señala como un prestanombres que encubría dinero para la exguerrilla colombiana en diversas cuentas.

El 19 de junio de 2017, un grupo congresistas federales estadounidense escribió al Secretario del Tesoro, Steven T. Mnuchin, solicitando una investigación contra las “actividades bancarias de Merino “que apuntan hacia asociaciones de larga data con organizaciones transnacionales que son objeto de investigaciones penales estadounidenses por tráfico de cocaína y blanqueo de capitales.

La carta dice, además, que Merino “adquirió cientos de millones de dólares en riquezas inexplicables mientras ayudaba a las guerrillas de las FARC con elementos corruptos del gobierno venezolano y otros grupos delictivos a mover los fondos a un puerto seguro”.

Diversas personalidades y entidades en Estados Unidos han denunciado los nexos de Merino con el crimen organizado internacional. A finales de junio de este año, la presidenta del Subcomité del Medio Oriente y África del Norte en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Ileana Ros-Lehtinen, dijo que es urgente que José Luis Merino sea nombrado capo del narcotráfico.

La lista Magnitsky

En agosto de 2018, congresistas estadounidenses pidieron al presidente Donald Trump sancionar a José Luis Merino y Enrique Rais con la Ley Magnitsky por su presunta vinculación con corrupción y crimen organizado.

Incluso, los congresistas le enviaron a Trump un documento en el que había una descripción sobre las actividades de José Luis Merino. El informe decía lo siguiente: “José Luis Merino es un alto miembro del partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y actual viceministro de Relaciones Exteriores para el gobierno de El Salvador. Él y Enrique Rais son copropietarios de la empresa de gestión de residuos, MIDES S.A. de C.V, actualmente atrapada en una disputa multimillonaria”, dice el documento que los congresistas estadounidenses le enviaron a Donald Trump.

Luego agregaba: “Se cree que Merino tiene vínculos con organizaciones criminales transnacionales. En 2008, funcionarios colombianos informaron que los correos electrónicos en la computadora portátil del comandante asesinado de las FARC, Raúl Reyes, vincularon a Merino a una red de tráfico de armas”.

En julio de 2016, el prominente senador federal del Partido Republicano, Marco Rubio, cuestionó por qué el gobierno norteamericano, en aquel momento encabezado por Barack Obama, no había sancionado a Merino, a quien señaló como lavador de dinero y contrabandista de armas.

En febrero del año pasado, La Prensa Gráfica publicó que el apoderado legal de Sigfredo Merino, hermano de José Luis Merino, se autovendió un buque a 1 dólar y lo usó para realizar millonarias compras de combustible. El buque, que tiene la capacidad para transportar 18 mil barriles, hizo alrededor de siete transacciones de gasolina valorados cada una entre $18 y $20 millones.

Según informó en esa ocasión La Prensa Gráfica, el barco se encuentra varado en el puerto de La Unión Centroamericana, en la bahía de La Unión, desde el 15 de octubre de 2015. Cuando Merino fue cuestionado por ese caso, este guardó silencio.

FOTO D1 archivo. José Luis Merino.

FOTO D1 archivo. José Luis Merino.