El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, delegó al vicepresidente del país, Félix Ulloa, para coordinar el estudio y propuesta de reforma a la Constitución para adecuarla a las «necesidades actuales de la sociedad», de acuerdo con una publicación del Diario Oficial que se conoció este martes.
El Diario Oficial, cuyas publicaciones son el último paso para la entrada en vigencia de leyes y decretos en El Salvador, publicó el acuerdo número 295 el pasado 1 de septiembre, en este se otorga esta función a Ulloa, según constató Efe hoy en la versión digital de la publicación.
El citado acuerdo establece que el vicemandatario queda delegado para «coordinar el Estudio y Propuesta de Reformas a la Constitución de la República», sin ganar un sueldo por dicha actividad.
Esto autoriza al abogado y exmagistrado del Tribunal Supremo Electoral para «llevar a cabo el estudio, análisis, discusión y propuesta de todas aquellas iniciativas que tengan como objetivo una reforma constitucional, como base de una legislación moderna y eficiente, acorde a las necesidades actuales de la sociedad».
«Para el desarrollo de las actividades antes detalladas, el Delegado en mención dispondrá de las más amplias facultades legales, pudiendo nombrar y designar para su asistencia a un Equipo Ad Hoc de Profesionales en Derecho, con carácter Ad-Honórem», concluye el acuerdo emitido el 24 de agosto.
De igual forma, Bukele delegó a Ulloa para «el desarrollo de asuntos de Integración Regional», con lo que podrá representar al país en encuentros, reuniones, congresos y foros de «alto nivel», incluidos en lo que esté «en obligación de participar» como parte del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA).
No es la primera vez que el Gobierno de Bukele habla de una reforma constitucional, dado que a finales de junio pasado Ulloa dijo en una entrevista televisiva que existe una «parte orgánica de la Constitución que es la que nosotros creemos que hay que revisar».
Entre ellas, sostuvo Ulloa, se encuentra la relación entre órganos de Estado para establecer una «armonía».
Se prevé que el partido Nuevas Ideas, surgido de un movimiento fundado por Bukele y dirigido por un familiar suyo, logre la mayoría en la Asamblea Legislativa en las elecciones de febrero de 2021.
Para que se dé una reforma constitucional, sin incluir las cláusulas pétreas, es necesario que se apruebe con 43 votos en una legislatura y que se ratifique en la siguiente con 56 votos de los 84 diputados.
La Carta Magna señala que «la reforma únicamente puede ser propuesta por los diputados en un número no menor de diez» y que «no podrán reformarse en ningún caso los artículos de esta Constitución que se refieren a la forma y sistema de gobierno, al territorio de la República y a la alternabilidad en el ejercicio de la Presidencia de la República».
Actualmente, en El Salvador un presidente no puede reelegirse inmediatamente, sino que debe esperar que pasen al menos dos periodos presidenciales (10 años), según un fallo de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de 2014.
Durante la campaña para las elecciones primarias del partido Nuevas Ideas, a menos un precandidato a diputado, que finalmente no fue electo para disputar un escaño en el Congreso, hablaba de permitir la reelección inmediata.
Una investigación del periódico digital El Faro señaló recientemente que el Gobierno de Bukele supuestamente mantiene negociaciones con la pandilla Mara Salvatrucha (MS13) y que estas incluyen el apoyo electoral para Nuevas Ideas.
«Documentos oficiales del Ejecutivo registran desde junio de 2019 negociaciones del actual Gobierno con líderes encarcelados de la MS-13. A lo largo de los meses se pactó la reducción de homicidios y se discutieron beneficios carcelarios y apoyo electoral para Nuevas Ideas en 2021», consigna el reportaje.
Con dicha formación Bukele pretendía llegar al poder en 2019, pero el retraso en su inscripción y otros problemas lo llevaron a utilizar como vehículo al partido de extrema derecha Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA).
Efe ha solicitado, antes de conocerse este nombramiento, en al menos dos ocasiones entrevistar a Ulloa para conocer detalles sobre la revisión a la «parte orgánica de la Constitución», pero hasta el momento no se ha brindado una respuesta.