La suspensión de la circulación del transporte colectivo que ordenó ayer el Gobierno de Nayib Bukele equivale al cierre total de la economía, criticó en conferencia de prensa la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP).
Los empresarios aclararon que ninguno de sus representantes se sentó a conversar con funcionarios las “restricciones excesivas” que están vigentes desde la madrugada de este jueves 7 de mayo. Sí hablaron, sin embargo, de la necesidad de mantener operando unas actividades productivas y de reiniciar progresivamente otras desde el día 16.
Javier Simán, presidente de la ANEP, también advirtió que los decretos presidenciales y de la Asamblea Legislativa violan la Constitución de la República.
“Las restricciones causarán daños a la población”, advirtió Simán. Agregó, además, que los empresarios pidieron a la Presidencia de la República que revierta lo más pronto posible los decretos.
“Golpea la productividad”, advirtió Jorge Hasbún, de la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (CAMARASAL).
En un comunicado que divulgó la ANEP los empresarios también señalaron que las medidas restrictivas vigentes, que han dejado sin transporte a miles de trabajadores incluyendo a los del Estado, han generado “abuso y caos”.
“Las restricciones adoptadas por el Gobierno, tal como advertimos, han generado abusos y caos, producto de la improvisación y la falta de consulta a los sectores involucrados”, puede leerse en el comunicado.
El artículo 3 del decreto que divulgó el Gobierno dice: “No podrá circular el transporte público de pasajeros” a partir de este jueves. El transporte privado sí estará autorizado para circular.
El nuevo decreto también establece los días habilitados para que los ciudadanos puedan salir a comprar alimentos, medicinas y otros productos básicos según el último dígito de su Documento Único de Identidad (DUI).