Hasta este día unos quince diputados fueron a la Fiscalía General de la República (FGR) a declarar como parte de las investigaciones por la irrupción del presidente Nayib Bukele Ortez con docenas de soldados y policías a la Asamblea Legislativa el 9 de febrero de 2020. Todos, sin embargo, aseguraron que no vieron “nada anormal” en eso.
Raúl Melara, fiscal general, calificó de “curioso” el que esos mismos diputados que se quejaron el 9 de febrero por la invasión de Bukele y los militares al Salón Azul de la Asamblea, ahora digan que todo está bien.
“Hasta el momento no hay ninguno que haya dicho lo contrario”, dijo en conferencia de prensa después de presentar una aplicación telefónica con la que la Fiscalía pretende facilitar las denuncias que presentan las mujeres salvadoreñas.
“No obstante eso seguimos indagando”, expresó.
Melara, sin embargo, no dio a conocer los nombres de los diputados que ya fueron a declarar a la Fiscalía.
Ese 9 de febrero llegaron principalmente diputados de los partidos Gran Alianza por la Unidad (GANA) y algunos del Partido de Concertación Nacional (PCN) así como también algunos de los disidentes de Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).
Pero algunos de los que llegaron se retiraron cuando vieron al pelotón de soldados en el Salón Azul. Felissa Cristales, de ARENA, es un ejemplo.
El 10 de febrero Mario Ponce, presidente de la Asamblea, calificó de “intento de golpe” contra la invasión de los militares.
“Ya tenemos resoluciones a ese intento de golpe al Órgano Legislativo. No es posible que hayan irrumpido con armas de fuego a este espacio. La Asamblea, con unanimidad, rechaza y condena la invasión del día domingo”, dijo en conferencia de prensa ese día.
Además, pidió a la Fiscalía investigar.
Los militares y policías de diferentes divisiones, entre estos de la Unidad del Mantenimiento del Orden (UMO), también rodearon la sede de la Asamblea.
El presidente Bukele convocó a la ciudadanía a presentarse al Centro de Gobierno para presionar por la aprobación de un préstamo por 109 millones de dólares para financiar la tercera fase del Plan Control Territorial.
Desde una tarima en los alrededores dijo: “El 28 de febrero los diputados van a salir por la puerta de atrás, yo les pido paciencia, si estos sinvergüenzas no aprueban esta semana la fase tres del plan control territorial nos volvemos a convocar aquí el próximo domingo”.
Esa insurrección, sin embargo, ya no llegó porque la entrada de los militares provocó el rechazo de una gran parte de los salvadoreños y de la comunidad internacional.