Manuel Ernesto Aguilar, superintendente de Electricidad y Telecomunicaciones, fue uno de los funcionarios que acompañó a Osiris Luna Meza en un viaje en avión privado propiedad de Grupo SeguriTech Integral Segurity en varias ciudades de México, según publicó en sus cuentas de redes sociales el expresidente Carlos Mauricio Funes Cartagena.
“Todo mundo está centrado en Luna Meza en lo del asunto del viaje a México. Pero pasan por alto que en el vuelo que hoy se cuestiona también viajó Manuel Aguilar. Él también debe responder ante la ley”, publicó.
Hasta el momento únicamente se sabía que lo había acompañado una mujer que publicó las fotografías de ambos sentados en el avión. Se desconocía que Aguilar, amigo de confianza del presidente Nayib Bukele y propietario del sitio en línea El Blog, también estaba con el director de Centros Penales.
El 1 de febrero de 2020 Funes Cartagena, que actualmente vive en Nicaragua, publicó que Grupo SeguriTech pagó el viaje en avión del funcionario.
Basó su afirmación en un memorando que le filtró una fuente del Ministerio de Seguridad. El documento tiene una firma y el sello del Viceministerio de Seguridad así como el destinatario y el remitente: de Luna Meza al ministro Rogelio Rivas. En el cuerpo el remitente dice: “Con el deseo de fortalecer y conocer la experiencia de Modelos de Seguridad en el exterior y evaluar las posibilidades de ser replicados en El Salvador, tengo a bien hacer de su conocimiento que he recibido invitación por parte de Grupo SeguriTech Integral Segurity en la Ciudad de México, con quienes sostendremos reuniones y visitas a los sitios donde nos darán a conocer la infraestructura y tecnología con la que dicho Grupo opera”.
Antes de conocerse públicamente, Luna Meza se había negado a dar a conocer quién había pagado su viaje en un avión privado debido a que los costos de un vuelo de ese tipo son superiores a los 25 mil dólares.
Él, sin embargo, se resistió durante meses a dar a conocer la información. Incluso en un momento aseguró que se lo había financiado una oenegé cuyo nombre no dio a conocer.
El caso llegó hasta el Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP) que ordenó la entrega de la información.
Luna Meza, sin embargo, se negó a revelarla alegando que era privada porque no se habían ocupado fondos públicos. Ahora puede decirse, sin embargo, que mintió porque ni una oenegé le pagó el viaje y sí ocupó fondos públicos porque solicitó viáticos y gastos de terminal aérea.
Por esto Juan Valiente Álvarez, director de Asuntos Políticos de Nuestro Tiempo, lo demandó en el Tribunal de Ética Gubernamental (TEG) por violaciones a la ley.
La Ley de Ética Gubernamental (LEG) prohíbe a los funcionarios recibir cualquier tipo de prebenda de una empresa con potencial interés en convertirse en proveedora del Estado. Las excepciones a esta regla son los viajes que pueden financiar otros Estados, organismos internacionales u oenegés sin propósitos de lucro.