La Junta Directiva de la Asamblea Legislativa estudia este lunes la posibilidad de interpelar o destituir a los ministros de Seguridad, Rogelio Rivas, y Defensa, René Francis Merino, por la irrupción militar al Salón Azul encabezada por el presidente, Nayib Bukele, el domingo.
Así lo informó a la prensa el diputado Reynaldo Cardoza, del Partido de Concertación Nacional (PCN), y uno veintena de legisladores que presenció la llegada de Bukele acompañado de militares y policías con armas de guerra.
Los integrantes de la Junta Directiva y de la Comisión Política se encuentran reunidos desde la mañana de este lunes para analizar la situación y también determinar si se cometió algún delito.
Según Cardoza, los diputados que presenciaron la toma militar han narrado al presidente del Congreso, Mario Ponce, lo ocurrido y algunos han pedido interpelar o destituir a los funcionarios, a los que también se sumaría el director de la Policía Nacional Civil (PNC), Mauricio Arriaza.
Enfatizó que “ayer hubo una toma de la Asamblea Legislativa” por parte del Ejecutivo y que los diputados tuvieron que retirar a los miembros de la seguridad, dado que los agentes de la PNC “los estaban molestando”.
Agregó que los diputados también estudian “la delimitación de los poderes del Estado por la posible “usurpación que hubo ayer de parte del señor presidente (Bukele) de la silla” de Ponce.
Bukele militarizó desde el sábado la zona cercana de la Asamblea Legislativa y convocó a sus simpatizantes, a los que desde el viernes llamó a la insurrección mediante su cuenta de Twitter si los diputados no le aprueban un préstamo de 109 millones para sus planes de seguridad.
Bukele, tras un discurso ante sus seguidores, ingresó al salón de sesiones del Congreso para orar.
“Ahora creo que está muy claro quién tiene el control de la situación y la decisión que vamos a tomar ahora la vamos a poner en manos de Dios”, dijo Bukele sentado en la silla del presidente del Legislativo.
Tras llevarse las manos al rostro durante unos minutos, salió y dijo a sus seguidores que “si quisiéramos apretar el botón, solo apretamos el botón” y pidió paciencia a sus seguidores, quienes gritaban “¡insurrección, insurrección, insurrección!
Diferentes organismos y los Gobiernos de Costa Rica y Estados Unidos han llamado a que esta crisis política se resuelve mediante el diálogo.
Esta ocupación militar de un órgano de Estado en El Salvador es un hecho inédito desde que en el país centroamericano se instaló la democracia tras varias décadas de dictadura militar y una guerra civil de 12 años.