Grupo SeguriTech Integral Segurity es la empresa que pagó el viaje a México en avión privado de Osiris Luna Meza, director de Centros Penales, según un memorando que publicó en su cuenta de Twitter el expresidente Carlos Mauricio Funes Cartagena y cuya veracidad el Faro.net confirmó con fuentes de Casa Presidencial y del Ministerio de Seguridad.
El memo que el exmandatario publicó el 1 de febrero en su cuenta de Twitter tiene una firma y el sello del Viceministerio de Seguridad así como el destinatario y el remitente: de Luna Meza al ministro Rogelio Rivas.
En el cuerpo el remitente dice: “Con el deseo de fortalecer y conocer la experiencia de Modelos de Seguridad en el exterior y evaluar las posibilidades de ser replicados en El Salvador, tengo a bien hacer de su conocimiento que he recibido invitación por parte de Grupo SeguriTech Integral Segurity en la Ciudad de México, con quienes sostendremos reuniones y visitas a los sitios donde nos darán a conocer la infraestructura y tecnología con la que dicho Grupo opera”.
El propósito del documento es pedir la autorización para que el Estado pague viáticos, gastos de viaje y terminales para Luna Meza.
El documento fue enviado el 10 de octubre de 2019, exactamente el mismo día de inicio de la misión oficial a México que terminó el 13 de octubre.
En su artículo el Faro.net citó a Miriam Barceló Durazo, encargada de comunicaciones y relaciones públicas de la empresa, que confirmó el pago del viaje que se supone fue para mostrar la oferta de servicios y productos de seguridad de SeguriTech.
SeguriTech ha ganado millonarios contratos con el gobierno mexicano de manera irregular, de acuerdo con el artículo que firmó el periodista Sergio Arauz. Incluso ha sido puesta en tela de juicio por la calidad de los servicios y productos que vende.
El viaje de este funcionario salió a la luz porque una de sus asistentes, Iris Yanet Valle de Funes, publicó una fotografía posando con él en un lujoso avión. Las críticas y los cuestionamientos en su contra inundaron las redes sociales inmediatamente.
En ese momento el presidente Nayib Bukele aseguró que su Gobierno no iba a gastar un centavo en vuelos privados para ningún funcionario. “Él fue a un viaje a México con motivo de su cargo, no fue pagado por el gobierno, porque fue comercial. Estando allá se trasladó en vuelo privado pagado por la institución que lo invitó”, explicó.
Luna aseguró en su cuenta oficial de Twitter que “jamás” ha pagado un vuelo privado con fondos públicos. “Fui invitado a México a conocer diversos proyectos de seguridad. Viajé ida y regreso por Avianca (también invitado) y, para poder realizar el viaje completo en poco tiempo, los vuelos internos (dentro de México) nos fueron ofrecidos sin costo alguno en vuelo privado”, detalló.
Varios ciudadanos presentaron solicitudes de información a la Dirección General de Centros Penales (DGCP) pidiendo los nombres de las empresas o particulares que pagaron el viaje de Luna en el avión privado.
La información, sin embargo, fue negada a todos los que la pidieron alegando que no se habían utilizado fondos estatales.
El caso llegó al Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP) que el 22 de enero ordenó a Centros Penales entregar la información.
En su resolución el Instituto recordó que las misiones oficiales y sus costos es información oficiosa, es decir, que debió publicarse en su portal de transparencia sin necesidad de petición ciudadana incluyendo cuando el origen del financiamiento es privado porque sigue teniendo vigencia el interés público. “El servidor público asiste en carácter oficial, con objetivos relacionados a su labor pública, es decir, que acude en representación de El Salvador y goza del salario que recibe del erario público durante esa misión”, dijeron los comisionados.
El director de Centros Penales, sin embargo, se negó a entregar la respuesta diciendo que presentaría un recurso en la Sala de lo Contencioso Administrativo de la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
Un par de días después el Instituto anunció que había iniciado un proceso sancionatorio contra Luna Meza por negarse a entregar la información.