La Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales de la Asamblea Legislativa acordó la tarde de este lunes enviar al pleno, para su discusión, un dictamen favorable para la creación de una comisión de antejuicio contra Norman Quijano, diputado de Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).
El diputado arenero es requerido por la Fiscalía General de la República (FGR) por presuntas negociaciones de votos con pandillas, según señaló también el testigo criteriado Noé.
“Comisión de Legislación acuerda emitir dictamen favorable en el que se expresa que el requerimiento de la FGR para que se retire el fuero constitucional al diputado Norman Quijano cumple con los requisitos pertinentes”, fue publicado en la cuenta oficial de la Asamblea y detalla que “lo hará del conocimiento del Pleno en su sesión del próximo jueves”.
Esta mañana el diputado de GANA Guillermo Gallegos planteó que había elementos suficientes para que Quijano fuera sometido a un juicio político para que se le retire el fuero y sea procesado por la FGR.
A Quijano se le acusa de haber ofrecido dinero a pandilleros de la Mara Salvatrucha (MS-13) entre la primera y segunda vuelta de los comicios electorales de 2014.
El testigo Noé, en el marco de las investigaciones de la Operación Cuscatlán, habló de esas conversaciones entre Quijano y la estructura criminal.
El 27 de enero la Unidad Especializada Contra la Impunidad y Delitos de Corrupción de la Fiscalía presentó la solicitud de antejuicio contra Quijano porque supuestamente cometió fraude electoral y negociaciones ilícitas en el contexto de las elecciones.
El 11 de octubre de 2019 el testigo criteriado declaró que Quijano había ofrecido hasta 1 millón de dólares a representantes de las pandillas.
En una de esas reuniones se presume que participaron tres cabecillas: el Snyper, el Chivo de Centrales y el Cisco de Tecla. Por el partido tricolor, según el testigo, también estuvo el entonces diputado Ernesto Ángulo.
Nomás trascender esa declaración, Quijano publicó en sus cuentas de redes sociales que nunca se ha reunido con criminales y menos les ofreció esa millonaria cantidad de dinero.
Unos días antes Noé había asegurado también que Ernesto Muyshondt, que posteriormente compitió –y ganó- como candidato a alcalde de San Salvador, compró votos tanto en las presidenciales de 2014 como en las municipales y legislativas de 2015.
Por esos votos se supone que pagó 69 mil dólares. También el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) compró votos para llevar a la presidencia a su entonces candidato Salvador Sánchez Cerén. En agosto de 2017, un testigo identificado solo como Nalo de Las Palmas declaró, durante un juicio contra los operadores de una polémica tregua entre las pandillas de entre 2012 y 2014, que los dos principales partidos políticos de El Salvador pagaron 350 mil dólares.
Quijano, antes de estos señalamientos, siempre acusó a Sánchez Cerén de haber ganado las elecciones gracias a las pandillas. Después que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) lo declaró oficialmente como el sucesor de Mauricio Funes, el entonces saliente alcalde capitalino convocó a marchas y en cada entrevista que brindada en medios de comunicación no desperdiciaba espacio para asegurar que era un presidente ilegítimo. “Fue electo por voluntad de las pandillas”, dijo, por ejemplo en una entrevista con la TeleCorporación Salvadoreña (TCS).