Francis Merino Monroy, ministro de Defensa, señaló que la ocupación de la isla Conejo que, desde principios de marzo del año 2014 hacen militares y el gobierno de Honduras, es “ilegal”.
“Esa isla salvadoreña está ocupada ilegalmente por Honduras”, dijo el funcionario en la entrevista Frente a Frente de la TeleCorporación Salvadoreña (TCS).
Aclaró, sin embargo, que la potestad para hacer reclamos la tiene el Ministerio de Relaciones Exteriores (RREE) que es el encargado de administrar la política exterior salvadoreña. Recordó, además, que los militares, como él, están subordinados al poder civil.
“No podemos tomarnos atribuciones”, expresó.
El 22 de febrero el presidente hondureño Juan Orlando Hernández y un grupo de militares inauguraron un helipuerto en la isla ubicada en el Golfo de Fonseca. En su discurso el mandatario del país vecino reivindicó ese territorio como propio.
En respuesta el entonces presidente Mauricio Funes Cartagena calificó el acto como “provocación” y reafirmó la soberanía de El Salvador sobre este territorio del Golfo de Fonseca. “Honduras tiene más de un año de estar provocando, sus autoridades y la prensa, y nosotros no hemos aceptado ningún tipo de provocación porque queremos hacer, siguiendo el mandato de los presidentes en la Declaración de Managua, una zona de armonía, paz, desarrollo y bienestar”, dijo en ese entonces.
Aclaró también que ese territorio nunca estuvo en disputa, es decir, nunca fue parte del diferendo que enfrentó a hondureños y salvadoreños en las cortes de La Haya, Holanda.
En esos días Funes afirmó que el país tiene archivos que comprueban que El Salvador es el legítimo propietario de la isla. Advirtió, además, que muy probablemente la ambición del país vecino sea la salida al mar territorial del Golfo y la explotación de los recursos naturales de la zona.
En abril de 2014 el entonces canciller Jaime Miranda reiteró que el país tiene los documentos que comprueban la propiedad salvadoreña de la isla. En esos días aseguró que la ocupación hondureña comenzó cuando en los años 80 militares nacidos en ese país ocuparon ilegalmente el territorio aclarando que precisamente ese es el origen de la disputa: ningún gobierno la reclamó y es más toleró la presencia invasora.
Desde aquellos días, según la versión oficial, El Salvador trabaja desde la vía diplomática para reclamar la isla. Se supone que el caso fue presentado a la Organización de las Naciones Unidas (ONU).