La Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia declaró este viernes inconstitucional el nombramiento de Ulises Rivas como magistrado del Tribunal Supremo Electoral (TSE) para el período 2014-2019.
Los magistrados argumentaron que el nombramiento de Rivas violentó los principios de independencia judicial, el principio de democracia representativa y republicana y la obligación de los funcionarios de servir al Estado y no a una fracción política, consignados en la Constitución de la República.
Rivas tendría vínculos con el FMLN, aun cuando fue propuesto por la Corte Suprema de Justicia. El exmagistrado negó siempre que fuera parte orgánica de dicho partido y emprendió una cruzada legal para impedir su destitución, aunque sí admitió haber apoyado en 2014 a la fórmula presidencial del FMLN, compuesta por Salvador Sánchez Cerén y Óscar Ortiz.
En el transcurso del proceso de inconstitucionalidad, la Asamblea Legislativa reconoció que no documentó la no afiliación partidaria de Rivas y sostuvo que la autoridad que debió hacerlo en un inicio era la Corte Suprema de Justicia. La Sala señaló en su demanda que si bien el Órgano Judicial es la primera instancia que debe verificar la no afiliación partidaria de sus propuestas, el Órgano Legislativo debe controlar las ternas de candidatos a magistrados, una vez llegan al conocimiento de los diputados.
En enero de 2017, la Sala de lo Constitucional admitió la demanda contra la designación de Ulises Rivas y en febrero de ese mismo año ejecutó la medida cautelar de separarlo del cargo. La sentencia definitiva se da a solo unas semanas de la conclusión del período para el que fueron electos los actuales magistrados, el cual concluye el próximo 31 de julio.
La sentencia fue firmada por los magistrados Aldo Cáder Camilot, Marina Marenco de Torrento, Carlos Sánchez y Martín Rogel Zepeda. El magistrado Carlos Avilés Velásquez emitió un voto disidente.