Con un perfil poco conocido en la opinión pública, la abogada Cledys Molina tiene un amplio bagaje de trabajo militante en las filas del FMLN. Lo que ha aprendido con el trabajo partidario, en el que ha aportado para importantes cuerpos legales como la Ley de Juventud, piensa ponerlo al servicio como secretaria general efemelenista, si la militancia le concede su voto el próximo 16 de junio.
Molina es la única mujer en contienda por el principal cargo de autoridad en el FMLN, que adelantó las elecciones internas programadas en un inicio para 2020, luego de la apabullante derrota en las elecciones presidenciales del pasado febrero.
“No hemos estado como dirigentes, hemos estado como militantes y profesionales”, destacó Molina, cuya militancia en la izquierda se remonta a cuando tenía 11 años, cuando era asistente en la extinta agencia de prensa guerrillera Salpress.
Fue la primera mujer que coordinó la Comisión Nacional de la Juventud del FMLN y hasta ha integrado la Comisión Política y el Consejo Nacional. Aunque no ha tenido algún cargo como funcionaria pública de alto perfil, Molina señala que toda la experiencia dentro del partido la convalida para aspirar a la secretaría general.
Para la candidata, el FMLN es un actor político importante y considera importante recuperarlo para ponerlo al servicio de lo que llamó “mayorías populares”. Al respecto, comentó que su propuesta para el partido pasa por una reconstrucción para crear áreas de trabajo que por el momento no existen.
Dichas áreas son la Secretaría de Tecnologías e Información, así como la Secretaría Económica y Social. Además de estas secretarías, Molina buscará fomentar el debate interno, algo que considera, ha quedado relegado en los últimos años dentro del partido.
El beneficio de dicho debate, agregó, debe ser la generación de pensamiento y estrategia política. Además de eso, prometió velar por que no existan trabas para aquellos que quieren afiliarse o regresar a ser militantes del FMLN.
Por otra parte, dijo que buscará la recuperación de los valores y principios revolucionarios del FMLN y buscará lo que da a llamar como “rectificación” de posiciones que perjudicaron al FMLN, en cuanto a no distanciarse o señalar apropiadamente casos de corrupción que salieron a la luz sus dos gobiernos.
De la misma forma trabajará para recuperar alianzas estratégicas a nivel nacional con el movimiento de trabajadores y las organizaciones estudiantiles, a la vez de tener una política clara en el tema de las víctimas del conflicto armado.
“Estamos dispuestos a todas las formas de comunicación, dispuestos a llevar al partido al siglo XXI”, recalcó.
Molina considera que es necesario un cambio en el partido y que ese es el mismo sentir de la militancia efemelenista: “Creo en la militancia y por eso decidí inscribirme”, afirmó.