Jorge Reyes, fotoperiodista de El Diario de Hoy, fue retenido y amenazado por miembros del Batallón Presidencial durante la ceremonia del traspaso de mando presidencial.
Según informó EDH, el hecho ocurrió cuando una señora de aproximadamente 70 años intentó acercarse al presidente Nayib Bukele en el momento que este se retiraba del Palacio Nacional.
Miembros del Batallón Presidencial impidieron el paso de la señora y el fotoperiodista grabó la escena con su teléfono celular. Fue en ese momento que los militares lo retuvieron.
“Yo estaba situado en el lado sur del Palacio a la espera de que saliera el presidente y hacerle un vídeo con mi teléfono. Una señora de más de 70 años de edad también esperaba a Nayib Bukele para entregarle una carta; desde hacía rato le insistía a los del Batallón Presidencial, pero estos no la dejaban pasar”, relató el fotoperiodista.
Luego agregó: “Yo había estado grabando lo que pasaba, y de repente uno del batallón alertó de que yo estaba grabando vídeo. Seis me rodearon y me pidieron que borrara la grabación, les dije que hablaría con mi jefe pero ellos insistían”.
En ese momento, la procuradora de Derechos Humanos, Raquel Caballero, caminaba por el lugar y el fotoperiodista le hizo señas. Se acercó. Preguntó qué sucedía. Los miembros del Batallón Presidencial siguieron amedrentando al fotoperiodista.
“Los del Batallón decían que borrara los vídeos porque de lo contrario me llevarían preso. Uno de apellido Gutiérrez me tomó la credencial y anotó los datos. Me dijo que si se hacía público los vídeos me iba a mandar a la cárcel y a los tribunales”, indicó.
Rigoberto Chinchilla, presidente de la Asociación de Periodista de El Salvador (APES), denunció el hecho en sus redes sociales.
“El fotoperiodista Jorge Reyes, en el cumplimiento de sus plenas funciones laborales, fue obligado por miembros del EMP a borrar sus fotografías. Debe haber una investigación y deducirse responsabilidad de lo ocurrido”, escribió Chichilla en Twitter.
Esta no es la primera vez que el Batallón Presidencial es señalado por abuso de fuerza. En el pasado, incluso, ha golpeado personas. Los miembros de esta guardia presidencial son calificados como energúmenos que se creen con derecho de pisotear a la gente.