El canciller de El Salvador, Carlos Castaneda, condecoró este viernes a la embajadora de Nicaragua, Gilda Bolt, por sus aportes al «fortalecimiento de los lazo de hermandad» entre ambas naciones.
La Cancillería salvadoreña señaló que la diplomática nicaragüense recibió la Orden Nacional «José Matías Delgado» por colaborar en el «buen entendimiento» entre Nicaragua y El Salvador.
Detalló que Castaneda destacó «la contribución de la embajadora Bolt en la promoción de la cultura nicaragüense en el país, así como en sus aportes en el ámbito de la cooperación, que han permitido desarrollar espacios para generar una dinámica regional».
También señaló que la diplomática nicaragüense «ha aportado en la coordinación y concreción de importantes encuentros al más alto nivel, los cuales han sido determinantes para estrechar los lazos de amistad entre los dos países».
El partido gobernante salvadoreño, el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) ha sido un cercano aliado del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) de Nicaragua.
El presidente salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, también ha respaldado a su homólogo nicaragüense, Daniel Ortega, en la crisis política y social que experimenta Nicaragua desde abril 2018.
Se espera que durante la administración del Nayib Bukele, quien tomará el Ejecutivo salvadoreño el 1 de junio, se dé un distanciamiento con el Gobierno de Nicaragua.
El pasado 23 de enero, Bukele calificó a Ortega y a los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Honduras, Juan Orlando Hernández, de «dictadores».
Bukele aseguró en su cuenta de Twitter que ellos «jamás tendrán ninguna legitimidad, porque se mantienen en el poder a la fuerza y no respetan la voluntad de sus pueblos».
Para encabezar su política internacional, Bukele designó el jueves a Alexandra Hill como canciller del próximo Gobierno.
Una de las incógnitas que plantea el próximo Gobierno es si mantendrá las relaciones diplomáticas con China o retomará el lazo con Taiwán, rotó por Sánchez Cerén en agosto de 2018.