El gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) expresó su “respaldo y solidaridad” al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, quien tiene prohibido salir de Brasil tras ser condenado a doce años de prisión por corrupción.
Mediante un comunicado, el FMLN sostiene que es “deplorable e injustificable” la condena a Lula da Silva, hecho por el cual hay “una indignación mundial”. Según el partido de izquierda, el objetivo es “impedir que el pueblo brasileño ejerza su legítimo derecho de elegir a sus gobernantes”.
El FMLN califica de “persecución” la sentencia contra su “compañero” el expresidente da Silva, la cual es parte de una estrategia de la derechas brasileña y continental.
Lula da Silva es considerado como un referente a seguir por el expresidente Mauricio Funes. A finales de mayo de 2009, a cuatro días de tomar posesión como presidente de El Salvador, Carlos Mauricio Funes Cartagena confesó durante una visita a Francia que el jefe de Estado brasileño de ese entonces, Luis Inácio Lula da Silva, “es un referente a seguir”.
Mauricio Funes, quien también se considera un perseguido político, se encuentra asilado en Nicaragua.
La Fiscalía General de la República demandó en marzo de 2016 al expresidente Funes acatando la resolución de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), la cual determinó que existen suficientes indicios de enriquecimiento ilícito, luego que Funes Cartagena, su exesposa Vanda Pignato y su hijo, Diego Funes Cañas, no lograran desvirtuar irregularidades en torno a un incremento patrimonial no justificado, que sobrepasa los $700,000.
Mauricio Funes debe dar explicaciones en torno a un aumento patrimonial injustificado de $552,669, mientras que la exprimera Dama, en calidad de cónyuge, canceló seis cuentas con $57,060 cuya procedencia de los fondos es desconocido, mientras que Diego Funes es demandado por la cantidad de $118,600, monto que presuntamente utilizó para la compra de vehículos.
El 3 de diciembre de 2016, el periódico Fhola S. Paulo publicó que Mauricio Funes recibió 5.3 millones de reales en efectivo −1.5 millones de dólares− en el año 2008 de parte de la constructora brasileña Odebrecht para la campaña electoral.
El dinero se transfirió a través de una empresa del publicista Joao Santana, quien dirigió la campaña de Funes.
Según la publicación, la cantidad se dedujo de la cuenta del PT con el contratista, que ha aceptado haber dado sobornos a varios funcionarios brasileños a cambio de la adjudicación de obras y contratos con el Estado durante el gobierno de Lula da Silva.
Marcelo Odebrecht, ex presidente ejecutivo de la constructora Odebrecht, declaró en la investigación de la causa “Lava Jato” −que investigó la corrupción en Petrobras− que Lula da Silva recibió sobornos por más de 2 millones de dólares (8 millones de reales en efectivo) de la constructora.
Joao Santana –quien diseñó la campaña electoral de Funes y después se quedó en el país como su publicista de confianza− fue capturado en febrero de 2016 acusado de ser parte de una red de corrupción en los dos últimos gobiernos brasileños.
El 19 de abril de 2017, Joao Santana y su esposa y socia, Mónica Moura, confesaron ante el juez Sergio Moro, encargado de la Operación Lava Jato, pormenores del gigantesco caso de corrupción en la petrolera estatal de Brasil Petrobras. Santana y su esposa fueron intermediarios para trasladar $3 millones de la constructora Odebrecht para la campaña de Mauricio Funes.
De acuerdo con una publicación del periódico O Globo, Mónica Moura declaró ante el juez federal que el gobierno del entonces presidente Lula da Silva dio un aproximado de tres millones de dólares (5.3 millones de Reales, moneda del Brasil) a Mauricio Funes para la campaña presidencial de 2009.