Con 57 votos, diputados de varias fracciones legislativas, acordaron reformar el Código Penal e incrementar a hasta 60 años de prisión, la condena contra pandilleros que maten a policías, soldados, custodios de centros penales, entre otros empleados que desempeñen una labor de seguridad pública.
La ley establecía que un pandillero que atente contra miembros de seguridad pública podría ser condenado hasta 50 años de prisión; sin embargo con esta reforma, la pena podría incrementar en 10 años más.
Lo anterior, también aplica cuando el crimen sea cometido contra familiares ,-en cuarto grado de consanguinidad y segundo de afinidad,- de los empleados del área de seguridad.
Además, el delito de limitación ilegal a la libertad, que se refiere a los desaparecidos o privados de libertad, incrementará su pena de 12 a 15 años de cárcel. Este hecho tenía una sanción penal de entre 4 y 8 años de prisión.
Los diputados, también, crearon el nuevo delito «violencia contra funcionarios y agentes de seguriddad», el cual castigará con una pena de entre 5 y 10 años de prisión, a quienes hostiguen, amedranten, amenacen acechen o vigilen miembros de seguridad. Este delito tiene un agravante de cinco años más, si los hechores son integrantes de pandillas.
Finalmente, el delito de desobediencia de medidas cautelares pasó de una pena de entre 1 y 3 años de prisión a una condena de entre 6 y 10 años.