El fiscal general de la República, Douglas Meléndez, dijo este lunes que fiscales y procuradores de la región están “siendo presionados y algunos hasta amenazados” por las investigaciones en el caso de corrupción transnacional de la empresa brasileña Odebrecht, en la que se ve involucrado el expresidente, Mauricio Funes, y la exprimera Dama, Vanda Pignato, tras facilitarles $3 millones de dólares que fueron utilizados para espacios publicitarios.
El jefe del Ministerio Público señaló, durante una reunión de fiscales y procuradores de la región denominada Combate a la Corrupción y Lavado de Dinero, realizada en la Ciudad de Panamá, que “estamos siendo presionados y algunos hasta amenazados por estas investigaciones”, indicó Meléndez después de sostener una reunión con el Fiscal General de Suiza, Michael Lauber, en donde se abordaron las investigaciones en torno al caso de corrupción transnacional Odebrecht.
“Estos sistemas corruptos, como el caso de Odebrecht, no solo corrompieron o se acercaron al sistema de contratos, también se acercaron a los sistemas políticos de distintos países que podría ser el caso de El Salvador”, concluyó Meléndez.
El caso Odebrecht, que ha salpicado a 12 gobiernos, entre estos de suramericana e incluso extendió sus tentáculos a Centroamérica, salió a la luz luego que la empresa constructora de origen brasileño de Marcelo Odebrecht, otorgara financiamientos a gobiernos de izquierda.
En la caso de El Salvador, señalamientos relacionan al publicista Joao Santana y el otorgamiento de $3 millones de dólares para el financiamiento de la campaña electoral de Mauricio Funes y que significó el primer periodo en la Presidencia para el FMLN.
Douglas Meléndez, interpreta las investigaciones y el trabajo fiscal contra estos sistemas de corrupción como “la barrera” de defensa de la población, lo que genera incomodidades y enemigos de diversos sectores oscuros.
Aunque del caso Odebrecht, la información en relación a las investigaciones es reservada por los fiscales de los países involucrados. Se ha conocido del trabajo coordinado y en conjunto que pretende llegar al fondo del desvío de más de $788 millones de dólares, indicaron los fiscales y procuradores citados en Panamá.
Todo comenzó cuando un testigo criteriado detalló que Antonio Paolocci, exministro de finanzas y uno de los hombres fuertes del Partido de los Trabajadores, actualmente encarcelado, pidió dinero para la campaña del presidente de El Salvador, Mauricio Funes.
A mediados de abril de este año, Meléndez visitó Brasil y se reunió con el vice fiscal de ese país. A su regreso declaró que tenía información relacionada al caso Odebrecht-Funes.
El fiscal general aseguró que había recibido información relacionada a un flujo de fondos provenientes de Odebrecht hacia El Salvador. Eran los primeros indicios. El tema no era nuevo. La política latinoamericana estaba envuelta en diferentes escándalos de corrupción relacionados a una red de sobornos de la empresa Odebrecht.
El periódico brasileño Folha do Sao Paulo reveló en diciembre de 2016 que Vanda Pignato, exesposa de Funes y actual secretaria de Inclusión Social, gestionó el dinero de la campaña del expresidente. No obstante, tanto Vanda Pignato como Funes han negado en diferentes ocasiones haber recibido financiamiento de referida empresa.