A más de un año de haber salido de El Salvador, para emprender otros retos en su carrera diplomática, La exembajadora estadounidense Mari Carmen Aponte, regresó como representante del gobierno estadounidense para el 25 aniversario de la Firma de los Acuerdos de Paz, ahora en calidad de Subsecretaria de Estado adjunta para Asuntos Hemisféricos en funciones.
A pocos días, según ella, de retirarse del servicio exterior estadounidense, Aponte compartió las sensaciones que le generaron, como representante del Departamento de Estado, el llamado a construir una “segunda generación” de Acuerdos de Paz, que dejó el acto oficial del pasado lunes.
Aponte vio esperanzador el llamado a retomar el diálogo, en un entorno de alarmantes índices de criminalidad que provocan migración en masa de salvadoreños hacia los Estados Unidos. Pero señaló que este llamado, el cual gozará del auspicio de Naciones Unidas, hace urgente el entendimiento entre las principales fuerzas políticas del país: ARENA y FMLN.
Este llamado encuentra a ambos partidos en un punto muerto de sus negociaciones para otorgar al gobierno más recursos que subsanen sus problemas de caja y faciliten el desarrollo de obras.
Los principales líderes de ARENA y FMLN, Mauricio Interiano y Medardo González, respectivamente, estuvieron presentes en el acto oficial de la conmemoración del cuarto de siglo de los Acuerdos de Paz, y aunque ambos concordaron en la necesidad de tomar la palabra al presidente y su propuesta de nuevos acuerdos, los dirigentes no perdieron ocasión de acusarse mutuamente.
Mauricio Interiano reiteró que el gobierno no ha cumplido con los acuerdos fiscales que desentramparon la aprobación de $550 millones en títulos valores el pasado noviembre, lo cual les hizo retirarse temporalmente de dicha mesa.
“Este es un gobierno con un proyecto claro, no un proyecto de país, para mantenerse en el poder”, cuestionó Interiano.
Por su parte, Medardo González restó importancia a las recriminaciones de Interiano, en el sentido de demandar al presidente Sánchez Cerén “pasar de los hechos a la acción”.
“No sé a qué se refiere ARENA, el presidente de la República es un hombre de hechos y avances, por ejemplo hemos trabajado por un mejor salario mínimo y son ahora ellos (ARENA) los que no quieren cumplir”, dijo González.
Pese a este estira y encoje, la subsecretaria Aponte confía en que ambas facciones políticas dejen sus diferencias. En ese sentido explicó que en los 26 municipios donde se implementa el programa “El Salvador Seguro”, personeros de ambos partidos han sabido poner de acuerdo.
“Si ustedes salieron del escoyo (de la guerra) hace 25 años, lo pueden volver a hacer”, declaró Aponte en conferencia de prensa.
En otros temas, la representante del Departamento de Estado dijo que Estados Unidos mantiene especial atención al combate a la corrupción y a los casos destapados en los últimos meses. En ese sentido hizo un llamado a fortalecer las instituciones que combaten este tipo de flagelo.
Por otra parte reconoció que la violencia en El Salvador es la principal causa de la migración indocumentada a Estados Unidos y que espera que la realidad prevalezca sobre los planes que el presidente electo Doanld Trump, trae para detener la migración irregular hacia suelo estadounidense.
“Tengo esperanza que la nueva administración no toque programas de beneficio a inmigrantes y la realidad se imponga”, señaló.