El subsecretario de Estado para asuntos hemisféricos de los Estados Unidos, Juan Sebastián González, vino a El Salvador a desvirtuar temores sobre las relaciones bilaterales ante la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y aseguró que losprogramas de cooperación para el país continuarán.
Lo anterior, debido a los temores generados por la advertencia del magnate Trump de deportar 3 millones de inmigrantes ilegales con antecedentes penales durante su gestión, y la construcción de un muro en la frontera sur con México para evitar el cruce de inmigrantes.
González garantizó la continuidad del Plan Alianza para la Prosperidad, lanzado por Estados Unidos para desincentivar la migración proveniente del Triángulo Norte Centroamericano (El Salvador, Guatemala y Honduras). Al respecto explicó que dicho plan es plurianual y cuenta con el apoyo de los dos partidos que controlan el gobierno estadounidense.
Dicho plan fue lanzado en 2014 a causa de la crisis humanitaria ocasionada por la entrada de menores no acompañados a la frontera sur, en especial de El Salvador, Honduras y Guatemala. La medida prometía un aporte inicial de $1,000 millones, de los cuales el subsecretario González aseguró que se han invertido $560 millones.
Al respecto recordó que para el ejercicio fiscal 2016, el Congreso aprobó $750 millones para apoyar este programa, pero que no se han podido entregar, debido a que los países aun deben cumplir con una serie de requisitos estipulados por el Capitolio.
El subsecretario explicó que son cuatro requisitos migratorios y otros 12 en materia de derechos humanos por parte del os países, los que se deben llenar para garantizar los desembolsos. Sobre el caso, aseguró que se está trabajando con los gobiernos del Triángulo Norte, para que a principios de 2017 se llenen los criterios y empiece el desembolso.
Por otra parte, González brindó un espaldarazo al combate que desde El Salvador hace a la corrupción y a las pandillas, principalmente a las redes de tráfico de personas, punto importante para continuar con el respaldo hacia el programa de Alianza para la Prosperidad.
No obstante, reconoció un aumento en la inmigración irregular proveniente del Triángulo Norte en 2016, en comparación con 2015, pero que no supera los números de 2014, que llevaron a decretar la crisis humanitaria.
Según González, la principal causa detrás de este repunte es que las personas están escapando de la violencia en sus países. Empero, a diferencia de 2014, grupos familiares completos están empezando a migrar más y ha disminuido la cantidad de menores no acompañados.