Como director del Instituto de Medicina Legal desde mediados de 2010 hasta diciembre de 2015, Miguel Fortín se caracterizó por controvertidas opiniones y agudas críticas al gobierno, mientras realzaba el trabajo de la primera institución que llega a las escenas del crimen en el país, las cuales son abundantes cada día, debido a la situación de violencia y criminalidad.
Alejado de la vida de funcionario, pero siempre en la palestra mediática, Fortín es ahora la cara visible del Movimiento Libertad, el cual se vislumbra como un nuevo generador de opinión y conciencia crítica en una tumultuosa coyuntura nacional.
Uno de los elementos de la coyuntura reciente, tiene que ver con la declaración del Secretario de Comunicaciones de la Presidencia, Eugenio Chicas, en torno a que en algunos territorios, el accionar de las fuerzas de seguridad ha sido tal, que las pandillas están desapareciendo.
Al igual que otras personalidades del ámbito político, Fortín restó crédito a dichas aseveraciones y recalca que no es la primera vez que los homicidios se reducen en el país, y que por lo general, son estadísticas que no pueden mantenerse en el tiempo.
Además criticó la falta de protagonismo del IML desde su salida como director, aseverando que su deber es informar a la población sobre las estadísticas de la inseguridad en el país.
El vocero de la Presidencia expresó la semana pasada que las pandillas están perdiendo fuerza a nivel nacional, y que incluso en algunos sectores del país estaban desapareciendo ¿Concuerda con este planteamiento?
Con toda tristeza lo digo: Absolutamente no. Y esa es una de las evidencias más claras de cómo la clase política ha hecho un divorcio con la población, creo que no tienen ni idea de los miedos que tiene la población, ni idea de la situación que mueve a un salvadoreño a salir a la calle a trabajar, sin saber que va a regresar a su casa, sobre todo si vive en lugares con presencia pandilleril.
¿Quién me va a decir a mí que conozca al pueblo, a decirme que no hay pandillas en el país, a decirme que se siente totalmente seguro y que no quiere emigrar?
¿Ve una salida a la problemática?
Hay esperanza, pero la tenemos que encontrar entre todos, porque los políticos no lo van a hacer por nosotros.
En sus años como director del IML, usted vio varias fluctuaciones en los índices de homicidios ¿A qué cree que se deba esta tendencia a la baja?
Esta no es la primera vez en que bajan los homicidios. Recordarán en 2012, después de marzo, los homicidios bajaron considerablemente y yo advertí que esa bajada no iba a ser permanente, porque hay distintos factores que pueden hacer suponer si algo va o no a ser permanente en el tiempo.
Lo que sucede es que los salvadoreños hemos perdido algo imperativo, que es la capacidad de informarnos ¿Cuántas conferencias ha dado Medicina Legal desde enero hasta el día de hoy? Ninguna, y está obligada por ley a dar las cifras de homicidios y desaparecidos, esto es no cumplir con el deber y la verdad es que los ciudadanos tenemos la obligación y el derecho de exigir a las autoridades que cumplan con su deber.
¿El gobierno actual está siguiendo el mismo camino de su antecesor de no poder mantener sostenible un promedio bajo de homicidios?
No lo sé realmente, antes tenía mayores herramientas para hablar con mayor propiedad y no sería sensato ni genuino de mi parte y si algo trato de hacer todos los días es decir la verdad, aunque me equivoco muchas veces.
¿Cree que se avecina una oleada de asesinatos por parte de las pandillas?
Esperaría que no, porque si llegara a suceder, vamos a tener otro baño de sangre y la realidad es que los salvadoreños ya no podemos aguantar más. El año pasado, El Salvador fue el país con la mayor tasa de homicidios en el hemisferio occidental y eso no es una alegría para nadie.
¿Qué propuestas plantea Movimiento Libertad en este tema?
Educación, adentro y afuera del movimiento, además de tener presencia mediática, no porque nos guste nuestra linda cara, sino porque así podemos tener incidencia en la gente; además de promover una serie de charlas y elementos comunitarios.